Pacto Social para frenar los discursos de odio

Organizaciones por los derechos humanos y los principales sindicatos han firmado este martes el Pacto Social contra los discursos de odio ante el aumento de este tipo de mensajes en la esfera pública y han instado a los partidos políticos a que traduzcan este texto en un pacto de Estado.

En el Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, Virginia Carcedo, vicepresidenta de Fundación ONCE, y Uge Sangil, presidenta de la Federación Estatal LGTBI+ (FELGTBI+), como portavoces de las entidades firmantes, han pedido «sumar y multiplicar talento y resultados» y abrazar las diferencias para crear «una España mejor, respetuosa con la diversidad en el ámbito más general de la palabra».

Los discursos de odio, ha sostenido Sangil en el acto de presentación del pacto, son la antesala de los delitos de odio, que, según datos del Ministerio del Interior, han crecido un 6% en el último año.

Con el fin de que este texto se traduzca en un pacto de Estado, las organizaciones lo han entregado a los políticos presentes en el acto: Boti García Rodrigo, directora general de Diversidad Sexual y Derechos LGTBI del Ministerio de Igualdad, y representantes de PSOE, Izquierda Unida y Más País.

Los objetivos del pacto son «reforzar el consenso social y político en defensa de los grupos en situación de vulnerabilidad», «impulsar la acción desde el Estado para proteger» a estos grupos e «informar a las víctimas de sus derechos y de las herramientas que tienen para saber ejercerlos y defenderlos frente a dichos discursos».

Para ello, se proponen una serie de medidas como la elaboración de campañas de sensibilización, la protección en el ámbito laboral, la medición de los discursos de odio y sus efectos, la formación y sensibilización, el control de la aplicación de las leyes y la coordinación para evitar cualquier retroceso en derechos humanos de los colectivos en situación de vulnerabilidad.

«Estar juntas, caminar unidas» enseña que es «posible trabajar, sumar, hacer vidas mejores (...). Detrás de cada cara veo a todas las personas vulnerables, que somos insultadas, pero también la posibilidad. Veo que somos capaces de crear un mundo mejor, vidas mejores«, ha defendido Sangil, tras lo que ha alabado la ley trans y ha urgido a tramitar las nuevas leyes de familia y vivienda.

Por su parte, Carcedo ha incidido en la importancia de que la clase política adopte las propuestas del pacto y reconozca en la «singularidad» y la «diversidad» un «elemento positivo, que suma y multiplica talento y resultados» para que nadie quede atrás.

España es un país «avanzado en igualdad social», reconoce el texto, pero los avances y la «convivencia social» están «en riesgo por la emergencia en la esfera pública de discursos de odio».

Este señalamiento tiene un «efecto tremendo y desmedido», pues «canaliza las frustraciones de la población contra grupos que tienen difícil defenderse, por su tradicional situación de vulnerabilidad y desigualdad, alimentando las discriminaciones y agresiones«.

Las organizaciones y sindicatos que suscriben el pacto son FELGTBI+, Fundación Triángulo, Asociación Chrysallis, Fundación ONCE, CERMI, Cesida, el Consejo de la Juventud de España, Red Acoge, CEAR, Hogar Sí, Fundación Secretariado Gitano, CCOO y UGT.

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