El niño con síndrome de Asperger expulsado de su centro ya tiene nuevo colegio
El menor afronta un periodo de adaptación a la nueva comunidad escolar, donde, en principio, contará con los recursos que precisa
El niño con síndrome de Asperger que fue expulsado de su colegio en Tafira, en la capital grancanaria, ya ha vuelto a clase. La Consejería de Educación el Gobierno canario ofreció a la madre, Isabel Alonso, que eligiera tres centros y al final pudo ofrecerle plaza en uno de ellos. El niño llevaba en casa desde la primera semana de diciembre, tras el incidente que dio lugar a su salida.
Publicidad
Los trámites se iniciaron a mediados de la pasada semana y el viernes el menor ya tenía colegio asignado. Su incorporación, dadas sus especiales condiciones, será paulatina. Por lo pronto, afronta estos días un periodo de adaptación. Ha estado yendo unas horas. Mientras, su madre ya ha podido reunirse con todo el equipo educativo y se muestra esperanzada con las primeras sensaciones y con los recursos con los que, a priori, contará su hijo.
«Estoy contenta por él, pero no deja de ser terrible que hayamos tenido que pasar por todo esto para que al final mi hijo reciba las atenciones que precisa y que estaban y están perfectamente establecidas en dos informes psicopedagógicos, el de 2016 y el de 2019», se lamenta Alonso. Entre otras cosas, especifican que requiere un profesor o profesora de Necesidades Específicas de Apoyo Educativo (NEAE) y un auxiliar.
Alonso atribuye precisamente a la ausencia de estos recursos las alteraciones de conducta que experimentó su hijo en el colegio anterior y que a la postre motivaron su expulsión definitiva, una decisión que, insiste la madre, no es justa ni proporcionada y contra la que ha advertido de que emprenderá una batalla, primero administrativa y luego judicial.
De hecho, estos días ultima el recurso de alzada que presentará ante la dirección territorial de Educación, que será la que, previo informe de la inspección educativa, deberá ratificar o enmendar la expulsión de su hijo del colegio Salvador Manrique de Lara. Entre los principales argumentos que esgrime Alonso figura el hecho de que en el expediente para su expulsión ni se mencionara que está diagnosticado de este tipo de Trastorno del Espectro Autista.
Publicidad
Regístrate de forma gratuita
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión