Así es la declaración del detenido por la joven quemada en La Isleta: quedaron por primera vez ese día

Fue el primer día que quedaban y el fuego se inició de manera fortuita. Es lo que ha declarado ante la Policía Nacional A.H., el ciudadano marroquí de 20 años detenido en relación con el caso de la joven grancanaria quemada en La Isleta.

Está previsto que el joven pase este viernes a disposición judicial, asumiendo el caso el Juzgado número 3 de Las Palmas de Gran Canaria, especializado en infancia y adolescencia y con el magistrado Tomás Martín al frente. La condición de menor de la víctima de las llamas hace que el caso pase a esa sede judicial.

Según la versión de A.H., él y la joven no se conocían hasta ese día. Habían quedado a través de terceros y fueron al inmueble de la calle La Angostura de La Isleta, un edificio casi en ruinas usado algunas veces por okupas .

Allí mantuvieron -siempre según su relato ante los investigadores-, una relación sexual y se quedaron a fumar. En un momento determinado se incendió de forma accidental el colchón sobre el que estaban, sin que él utilizara líquido acelerante alguno ni otro material combustible que el propio colchón.

Las llamas la afectaron sobre todo a ella, con daños tan graves que motivaron, tras una primera atención en el Hospital Doctor Negrín, su traslado a la unidad de quemados del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, donde sigue ingresada.

Él fue atendido inicialmente también en el Negrín por inhalación de humo.

La complexión de A.H. facilitó presuntamente que pudiera salir con más facilidad del inmueble de la calle La Angostura, mientras las llamabas se cebaban con ella.

Ambos fueron encontrados por agentes de la Policía Nacional que acudieron al lugar alertados por el incendio. Un testigo que iba por la zona también los vio y su declaración ha sido tenida en cuenta por los agentes al cargo de la investigación.

A.H. llegó en junio de este año a Lanzarote en patera. Allí se firmó una orden de devolución a su país que no se ha ejecutado. Fue trasladado al centro de migrantes del Canarias 50, en La Isleta, lugar del que, como otras personas adscritas al mismo, salía y entraba a su voluntad al ser mayor de edad.

La menor estaba tutelada en un centro de Valsequillo, del que se había fugado y su desaparición fue denunciada, como ha indicado el Gobierno canario.

Inicialmente el caso se investigó como violencia machista en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2 de la capital grancanaria pero el jueves se inhibió en favor del juzgado de guardia en el momento de los hechos al no quedar acreditada una relación entre la menor y A.H.

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