4 molinos flotantes gigantes hacen Gofio

El parque eólico Gofio es de otra dimensión. El proyecto cuya autorización administrativa previa y declaraciones de impacto y de utilidad pública se someten a información pública, cuesta casi 136 millones de euros y utilizará el puerto de Arinaga para el montaje y el transporte con remolcadores de los aerogeneradores a su emplazamiento, a profundidades que oscilan entre los 64 y los 88 metros.

Del modelo GE Haliade 12X o similar, una altura de buje de 140 metros, 220 metros de diámetro de rotor y 260 metros de altura total, cada molino estará conformado por 3 palas de 107 metros de largo formando un ángulo de 120° entre ellas. Flotarán sobre estructuras semisumergibles de tres columnas del modelo Windfloat de Principle Power o similar, que garantiza una estabilidad suficiente en cualquier estado de mar y que se anclarán al lecho marino mediante catenarias y anclas de dragado.

Las tres columnas, a su vez, estarán unidas y reforzadas por un sistema de barras de unión que mejora el comportamiento de la estructura en condiciones de mar adversas, garantizando la producción en todo momento. La estructura es autoestable durante la fase de transporte y durante la inmersión hasta el calado de operación mediante el lastrado de los tanques alojados en las columnas.

La instalación del aerogenerador en puerto con medios terrestres y en un entorno controlado permite un ahorro sustancial de los costes y riesgos del proyecto.

Una línea de evacuación de alta tensión, soterrada en el lecho marino, conectará los molinos entre sí y con la subestación de entrega de energía en tierra, prevista junto a la central de Juan Grande. Y también en tierra se creará una subestación eléctrica para la protección, control y medida del parque.

La promotora, Greenalia Wind Power, con sede en A Coruña, quiere iniciar la fabricación en el verano de 2023 para enchufar Gofio a la red eléctrica insular a mediados de 2024. El proyecto sostiene que Gran Canaria es «seguramente la zona que presenta un mayor y más estable recurso eólico marino no sólo de España sino también a nivel europeo» , además de «una mucha menor severidad del mar en comparación directa con las zonas atlánticas del norte de España o del Mar del Norte europeo».

El área marina elegida se considera «apta sin condicionantes» en el Estudio Estratégico Ambiental del Litoral Español para la instalación de parques eólicos marinos.