Directo Lotería Nacional en directo: premios y resultados del Sorteo Extraordinario del Día de la Constitución 2025

Costas: al fin

Del director ·

O Iceta no es tan fiero como lo pintan o Torres tiene una gran capacidad de convicción

Cuando se supo que Carolina Darias dejaba el Ministerio de Política Territorial para pilotar el de Sanidad, más de uno en Canarias se echó a temblar. Y cuando se confirmó que el elegido para relevarla en esa cartera era Miquel Iceta, no fueron pocos los que se hicieron cruces.

Publicidad

Desde el punto de vista de Canarias, Iceta llegaba con el sambenito de que solo iba a estar ocupado en favorecer a Cataluña y tender puentes con el soberanismo de su tierra, a ver si así era posible articular una alianza de gobierno para la Generalitat. Claro que se les olvidaba a los autores de esa tesis el hecho de que entre Iceta y ERC hay varias cuentas pendientes, empezando por el hecho de que el político socialista catalán no fue a visitar a Junqueras en la cárcel y eso parece que el dirigente de ERC no se lo perdona.

Lo cierto es que Iceta, ese al que se temía en ciertos foros de las islas, es el tipo que ayer se sentó con el presidente canario, un encuentro que se saldó con el anuncio de que para el verano tendremos las competencias en Costas. Y que se pondrá en marcha una mesa bilateral que parecía impensable hace no mucho. Así las cosas, o Iceta no es tan fiero como lo pintaban o Torres tiene una capacidad de convicción sustentada seguramente en la táctica de la gota malaya. Seguramente será mitad de una cosa y otro tanto de la otra.

El día que se firme lo de Costas habrá que anotarlo en el inventario de fechas para la historia autonómica. No solo porque estamos hablando de una de las competencias que bajo control estatal más quebraderos de cabeza ha provocado en Canarias entre dirigentes públicos e inversores privados, sino porque nuestra realidad archipielágica, la escasez de territorio y la dependencia del turismo convierten esa materia es clave para el desarrollo económico y social.

Si algo debió ser competencia canaria desde el minuto uno de la autonomía era precisamente Costas, pero ya se sabe que en Madrid todavía cuesta hacerles entender esto de la ultraperificidad y que lo que supone vivir rodeados de agua salada.

Publicidad

Solo espero que cuando llegue ese momento histórico, la autonomía esté a la altura de la importancia de lo que se consigue y lo mucho que ha costado. Lo digo porque igual caemos en la batalla entre el Gobierno canario, los cabildos y los ayuntamientos, jaleada interesadamente por los empresarios, sobre dónde se instala el despacho del responsable de Costas, de qué isla es, cuál es su playa favorita para coger sol... esas cosas tan nuestras. Por desgracia.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Regístrate de forma gratuita

Publicidad