Borrar
Kirian celebra su primer gol en Primera. cober
La estrella de Kirian brilla con más fuerza que nunca

La estrella de Kirian brilla con más fuerza que nunca

El tinerfeño selló el primer triunfo de la temporada con su primer gol en la máxima categoría luego de volver por todos sus fueros al superar un cáncer la campaña pasada

Kevin Fontecha

Las Palmas de Gran Canaria

Lunes, 25 de septiembre 2023

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Opciones para compartir

No hay límites para los seres de luz. El 2 de agosto de 2022, Kirian Rodríguez anunciaba públicamente que le tocaba jugar el partido más complejo. «El lunes me consiguen extraer un ganglio para analizar y se confirma que tengo un linfoma de Hodgkin», dijo en Barranco Seco. El canterano, que no escondía su sonrisa, sabía que esa batalla la iba a ganar. En enero de 2023 superó el cáncer y 271 días después volvió a ponerse las botas para competir en un encuentro oficial.

Pieza capital en el ascenso a la máxima categoría, pues disputó los últimos cinco encuentros en Segunda División, rindiendo a un nivel sobresaliente y regalando incluso una asistencia, estaba esperando su momento. Nunca desistió en su lucha. Fue ejemplo en todo el archipiélago y recibió de paso los elogios y el respeto de todo el fútbol español. Emotiva fue su alta médica. Arropado por sus seres queridos, el canterano de la UD Las Palmas consiguió exhibir de nuevo su inmensa sonrisa sobre el césped.

Su carrera no ha sido la más sencilla. Todo lo contrario. En el camino hubo piedras, baches y hasta precipicios. Pero Kirian insiste en demostrar que él es especial. Que está tocado por una varita. Asu calidad, innata con la pelota en los pies, se le suma la perseverancia. Asu forma de ser, siempre cargado de humildad, le anota la bondad. El domingo pasado, en un Gran Canaria con 24.848 aficionados en las gradas, todo regresó a la verdadera normalidad.

No ganaba Las Palmas en sus dominios desde el pasado 26 de febrero. Demasiados meses por medio, debió pensar Kirian, que tenía entre ceja y ceja que debía ser él quien rindiera tributo a su hinchada con un golazo desde la frontal. Tampoco había visto portería el de Candelaria desde abril de 2022, cuando marcó también el gol de la victoria ante el Amorebieta en Segunda División.

Ante el Granada (1-0), rival directo en la pelea por la permanencia, Kirian Rodríguez, que además jugó en su posición y no en el pivote donde le estaba ubicando García Pimienta, besó la red. El tinerfeño tenía claro cómo y cuándo iba a pasar. Se estaba jugando la vida misma Las Palmas y de eso el bueno de Kirian, que regateó la enfermedad con uno de sus caños maestros, sabe bastante. Por eso, cuando Sory Kaba descargó el balón hacia la frontal, los cielos se abrieron. A Kirian le daba igual que la fortuna tuviese que buscarla con la bota que menos domina. Qué más le daba. Si la iba a enviar a la escuadra igualmente.

Así fue como el Estadio de Gran Canaria enloqueció. Agritos de su ídolo. Con un zurdazo cargado de nervio y maldad. En el minuto 92 y después de llevar media hora la UD jugando con un futbolista menos en el campo -por la expulsión de Mika Mármol-. El dorsal 20 celebró con emoción su reencuentro con el éxtasis que regalan los goles en tiempo de descuento. Y, por si fuera poco, entregaba al equipo amarillo un triunfo que necesitaba con ansiedad para salir de los puestos de descenso a Segunda. En vistas, encima y todo sea dicho, a visitar el templo de un Real Madrid que llega tocado tras perder el derbi madrileño arrollado por un Atlético muy superior. Y, cómo no, ante un Granada que es rival directo en esa permuta por la salvación en la máxima categoría.

Aveces nos perdemos en las lamentaciones. En ver grises los días incluso soleados. En encontrar problemas donde tan solo hay oportunidades. Eincluso en caer en enfados absurdos que solo el tiempo será capaz de reconciliar. Hay ciertas cosas de la vida que por mucho que se traten de explicar, no se llegan a entender. Y en eso Kirian es el faro de toda Gran Canaria. Su estrella, a pesar de todo lo que le ha tocado sufrir y batallar, brilla con más fuerza que nunca. Su gol al Granada, que sacó a Las Palmas del descenso y la colocó en la decimoquinta posición de la tabla clasificatoria, es el triunfo de la alegría y la esperanza. El tinerfeño dibuja el camino.

No pudo ser casualidad que su tanto lo celebrase con el brazalete de capitán en el brazo izquierdo. El destino le estaba guardando semejante momento de vitalidad y satisfacción. Porque el trabajo bien hecho suele recoger los frutos. El vestuario encuentra en Kirian a ese líder silencioso. Es diferente. Amigo de los libros y las meditaciones, nunca con una palabra fea en la boca. El propio Viera confesó al término del choque que la plantilla se alegraba una barbaridad de que hubiese sido el tinerfeño el que entregase el mayor premio a Las Palmas. El primer triunfo en Primera en 2023. Primero de muchos.

Publicidad

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios