Así fue la fiesta de 11.000 euros de la trama de corrupción
CASO MEDIADOR ·
El general Espinosa asistió a la juerga en la que también estaba Taishet Fuentescanarias7
Las Palmas de Gran Canaria
Lunes, 20 de febrero 2023
La investigación del caso Mediador está plagada de reuniones, fiestas, encuentros e intercambio de favores.
Una de las que más llamó la atención a los investigadores es la que se celebró en el hotel NH Imperial Playa de la capital grancanaria, con un importe de unos 11.000 euros. Uno de los empresarios que aspiraba a conseguir un trato de favores pagó la factura.
Fue el 24 de febrero de 2021. Asistieron Taishet Fuentes, entonces director general de Ganadería, que aparece en las imágenes con camisa blanca y una toalla de cintura para abajo; Miguel Ángel Robayna García, que aparece mencionado en la investigación como «testaferro»; M. A., que hacía las veces de intermediario; el general de la Guardia Civil Francisco Espinosa Navas, que es el único encarcelado de la docena de investigados; Jesús María Pérez Spínola, interesado en colocar placas solares en instalaciones ganaderas; Raúl Gómez Rojo, también en el negocio de la energía fotovoltaica, y Plácido A. Peña.
Restaurantes, clubes de alterne...
Pero no es el único encuentro de varias personas relacionadas con la trama del que hay constancia gráfica. La investigación relaciona más de una docena de comidas en Madrid y Canarias, así como visitas al pub Sombras, un club de alterne madrileño. También en Madrid hubo comidas en restaurantes como La Trainera y La Quinta, habituales en los círculos empresariales.
La foto de rigor con la Virgen del Pilar
Lo llamativo es que todos se prestaban a hacerse fotos. Incluso quienes iban al despacho del general en la Dirección General de la Guardia Civil y posaban ante la imagen de la Virgen del Pilar de la capilla de ese inmueble.
Espinosa y el vodka Blat
En otra de las imágenes, el general aparece comiendo en un restaurante en Madrid y en primer plano una botella de vodka Blat. Según los investigadores, fue un regalo mandado desde Canarias por el empresario Esteban Banús, que pretendía utilizar los contactos del militar para ampliar las ventas de ese vodka en el exterior.