Urgente Luis García: «A nosotros no nos engaña la posición del Mirandés»

Los cabecillas del catastro, condenados en otras estafas

Dos instancias distintas han condenado a los principales acusados del caso del catastro por estafas similares a las que ahora se investigan. El Supremo ha impuesto 11 meses de cárcel a Roque Martín Mesa, y un Juzgado de Fuerteventura, tres años a Santiago Morales.

Antonio F. de la Gándara

Martes, 21 de julio 2020, 20:48

Mientras el Juzgado de Instrucción número dos de la capital grancanaria tramita el macroproceso en el que se investiga a 19 personas por supuesta usurpación y venta fraudulenta de fincas en 20 municipios de la provincia de Las Palmas, dos órganos judiciales distintos –uno de ellos el Tribunal Supremo, en un fallo firme– ya han dictado sentencia en referencia a los dos principales acusado en la rama empresarial de la trama delictiva: los empresarios de Fuerteventura Roque Martín Mesa (La Oliva, 1948) y Santiago Morales Morales (Las Palmas de Gran Canaria, 1978).

Publicidad

La Sala Segunda del Tribunal Supremo –en una resolución dictada por su presidente, el grancanario Manuel Marchena– notificó el pasado 8 de marzo el auto que inadmite el recurso de casación interpuesto por Roque Martín contra la sentencia de la Sección Primera de la Audiencia de Las Palmas que el 18 de diciembre de 2015 condenó al administrador de fincas más opulento de Lajares –Martín Mesa tiene más de 20 coches de alta gama, entre ellos dos Rolls Royce y cuatro Mercedes Benz y propiedades en Argentina– a 11 meses y 21 días de prisión como autor de un delito de estafa procesal en grado de tentativa.

La sentencia, ahora confirmada por el Supremo y sin posibilidad de revisión, declara probado que en el verano de 2005 el empresario intentó apropiarse de dos fincas en Lajares –una en el paraje conocido como Cerca Nueva y otra en Vista de Las Maretas– y para ello «confeccionó un documento privado de compraventa enteramente mendaz» para dar apariencia de legalidad a su amaño. Intentó colarle el engaño al Registro de la Propiedad de Corralejo y llevó a juicio a los legítimos dueños de los terrenos, que acabaron querellándose contra él y ganando el pleito, ahora ya sin vuelta atrás.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Regístrate de forma gratuita

Publicidad