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Le amenaza de muerte al ir a cobrar una deuda por un trabajo

Tras meses de espera, en la mañana de ayer Marco García fue citado para cobrar los 310 euros que le debía un empresario dedicado a las reformas de viviendas. Lo que no esperaba era que al llegar le sacase dos cuchillos de cocina y corriese hacia él amenazándole de muerte. Marco se pudo refugiar en un portal y llamó a la Policía que detuvo al presunto agresor.

Jueves, 16 de julio 2020, 08:02

Los hechos ocurridos sobre las 10.00 horas de ayer en los bajos del edificio España, en la plaza Doctor Rafael O’Shanahan, difícilmente se le olvidarán al pintor Marco García, vecino del barrio de Casablanca en la capital grancanaria.

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Tras meses de espera, y tras varias peticiones a su antiguo jefe para que pagara los 310 euros que le debía por un trabajo, este le citó en el lugar. «Vino hacia mi, hizo el gesto de sacar la cartera o algo del bolsillo, se levantó la camiseta y sacó dos cuchillos de cocina de grandes dimensiones y empezó a correr hacia mi insultándome y amenazándome de muerte. Temí por mi vida. Salí corriendo, me di con un bolardo en la pierna y un chico me agarró y me metió en un portal. Si no, no sé que hubiese pasado», relata aún nervioso el joven.

Ya resguardado, Marco llamó a la Policía Nacional para denunciar los hechos, momento que aprovechó el presunto agresor para huir del lugar y resguardarse en su vivienda, cercana a la zona.

Tras llegar los agentes, estos dieron con el presunto agresor y procedieron a su detención y a la incautación de los dos cuchillos de cocina con los que intentó agredir al joven.

Testimonio

Una vez en la Jefatura Superior de Policía de Canarias, cercana al lugar de los hechos, la víctima identificó los cuchillos intervenidos por los agentes como las armas que portaba el presunto agresor, identificado como Julio G., de origen extranjero y dueño de una empresa de reformas, y prestó declaración. Después acudió a un centro de salud para ser atendido por un golpe que se dio al huir de su antiguo jefe. Hoy se volverán a ver las caras en un juicio rápido.

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