El grupo Ralons blinda su futuro

Seguridad Integral Canaria espera por el visto bueno del Ministerio de Interior para comenzar a ofrecer su servicio de transporte de fondos en Madrid a partir de 2015. Este jueves presentó su última adquisición: cinco vehículos de última generación con los que la empresa de Ralons blinda su futuro.

La empresa de seguridad del grupo Ralons ha destinado «cerca de dos millones de euros» a la compra de los cinco vehículos de máxima seguridad y la implantación de la tecnología necesaria para dar apoyo logístico a estos blindados dotados con los últimos sistemas para hacerlos inexpugnables, según explicó ayer el vicepresidente del grupo Ralons, Héctor de Armas.

Con la adquisición de estas fortalezas motorizadas de 16.500 kilos de peso, Seguridad Integral Canaria alcanza la cifra redonda de 20 unidades de transporte de fondos y valores que de momento solo tiene autorización para emplearlos en la Comunidad canaria. Y solo de momento, porque la inversión forma parte de la hoja de ruta del grupo del empresario Miguel Ángel Ramírez, que ya ha solicitado al Ministerio de Interior los permisos administrativos para dar el salto a Madrid.

Si los planes salen según lo previsto, los acorazados de Seguridad Integral se pasearán por la capital de España a finales de 2015, y dentro de cinco años, por todo el país.

Estos objetivos expansivos no están al alcance de cualquiera. Tal y como explicó ayer el director del área de Transportes de Seguridad Integral Canaria, Jorge Hernández, el transporte de efectivo y valores es un servicio de seguridad exclusivo que requiere de una gran inversión.

Tanto que «de las más de 1.300 empresas de seguridad que operan en España, tan sólo cuatro están autorizadas a prestar este servicio en todo el país», y únicamente dos en el territorio canario, una de ellas Seguridad Integral Canaria. La empresa de Ralons presentó en el Muelle Deportivo de la capital grancanaria los blindados en los que se pueden transportar en las Islas hasta 12 millones de euros.

Los principales clientes que reclaman estos vehículos «son las grandes superficies y las entidades financieras».

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