Buen rollito
Si esto es el mandato del buen rollito, ¿cómo serán las cosas cuando llegue la mala hora? El reparto del poder y del dinero no entiende el lenguaje coloquial, como se ha podido comprobar con la experiencia acumulada en el Gobierno canario durante el último año y medio. Acontecimientos recientes han acelerado la combustión del tinglado que mantienen Coalición Canaria (CC) y PSOE, de manera que se exige un nuevo guión con nuevos actores. Para ello, es indispensable retirar del escenario los mecheros, los bidones de gasolina y las manos que prenden ambos elementos. Es necesario además contar con expertos en el manejo del agua, nivel bombero o similar. Y con voluntarios capaces de levantar estructuras nuevas con los restos chamuscados del incendio. ¿Están capacitados para ello los mismos protagonistas que tramitaron las llamas?
Publicidad
Acaso el lector profano no alcance a comprender la escandalera, si se tiene en cuenta que la economía de las Islas crece a un ritmo que duplica el de potencias como Alemania o Reino Unido. Tampoco es fácil de explicar que todo ocurre cuando aumenta el dinero fresco en las arcas públicas, porque las debilidades del Estado permiten flujos de liquidez hasta ahora vetados a los lejanos canarios. En todo caso, algo tendrán que poner de su parte ustedes, isleños. No se quejen si la factura de sus viajes aumenta, y ya no se aplican los descuentos de residencia cuando quieran volar en manada, que todo es por su bien. ¡Si vivir en Canarias es un privilegio, con ese sol que tenéis todo el año!
Algunos dicen que falta experiencia en contextos favorables, después de tanta austeridad. Que la mochila de estos jóvenes gobernantes no trae nada nuevo, como esas ruedas que entretienen al ratón en su jaula. Hoy, CC y PSOE insistirán en que el suyo es el mejor pacto posible, a pesar de los pesares. Y vuelta a empezar.
Regístrate de forma gratuita
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión