Las conexiones marítimas y aéreas crecerán un 10% a partir del lunes

A la espera de que el Gobierno confirme que a partir del lunes habrá libre movilidad entre las islas -ahora solo se puede viajar por causas justificadas y recogidas en el Real Decreto 463 del 14 de marzo- la aerolínea Binter y las navieras Fred Olsen y Armas-Trasmediterránea, que han estado operativas durante la crisis, se preparan para ir aumentado las frecuencias «poco a poco» y dar respuesta a la demanda que vaya surgiendo. Canaryfly, que no ha operado en este tiempo, esperará hasta julio para retomar su actividad aunque no al 100% de aviones y frecuencias.

En el caso de Binter y Fred Olsen el aumento previsto de sus viajes para la próxima semana oscila entre un 10% y un 20% y la idea es seguir incrementándolos progresivamente. Así todo, como advierten, «aún se está lejos» de alcanzar las cifras de viajes que tenían hace tres meses. Y es que la covid-19 ha reducido más del 90% su demanda sumiendo a las empresas «en un drama».

El director de flota de Fred Olsen, Juan Ignacio Liaño, aporta un dato que es revelador: en abril pasado, en plena crisis, la naviera movió un total de 11.000 pasajeros la misma cifra que hacía en un solo día de abril de 2019. Esta naviera realizará la próxima semana y, siempre que el Gobierno dé libertad para viajar entre islas, 112 viajes, esto es, un 10% más de los actuales.

Su previsión es operar al 35% de su capacidad y a partir de ahí, ir subiendo pero todo dependerá de la demanda. «Vamos a empezar la semana que viene a aumentar horarios en algunas líneas como Gran Canaria-Tenerife o Fuerteventura-Gran Canaria así como Los Cristianos, La Gomera y La Palma», indica Liaño. También prevé algunos cambios de barcos para aumentar la capacidad y reforzar los días de más pasaje; viernes y domingos.

La aerolínea Binter, que opera actualmente con cuatro aviones y 40 vuelos diarios, aumentará los aviones y vuelos en función de la demanda. Su idea es aumentar de dos en dos la flota para lograr a lo largo de junio a operar 60 vuelos diarios con seis aviones. Así todo, aún seguirán lejos de los 200 vuelos diarios que operaban antes de la crisis.

La naviera Armas, que ha estado operando al 90% por la carga y el suministro, reforzará algunas rutas con barcos de más capacidad y aumentará frecuencias en función de la demanda. Solo tres de sus barcos «estarán en standby» y se incorporarán en función de la demanda.

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