La red canaria de refugios climáticos: edificios públicos climatizados y con agua
El calentamiento global obliga a implementar zonas y espacios donde resguardarse de las altas temperaturas. Las islas los incluirán en la ley del cambio climático
Edificios públicos con climatización, con espacios de esparcimiento y con agua potable disponible conformarán la red de refugios climáticos de las islas. O al menos es la recomendación del comité de expertos que asesora al Gobierno canario para Cambio Climático, Economía Circular y Azul. Canarias debe contar con una red de refugios climáticos y con «corredores verdes», asegura la científica Noelia Cruz, miembro del comité y docente de la Universidad de La Laguna (ULL).
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Así se lo hicieron saber al Gobierno canario, que aprovechará la modificación de la ley del Cambio Climático que está llevando a cabo para incluir los refugios. Se trata de espacios en los que la ciudadanía podrá resguardarse de las altas temperaturas y disponer de agua y lo más factible es que las administraciones recurran a sus propias infraestructuras.
El problema, señala la investigadora, es que estos edificios no están repartidos por todos los barrios de una ciudad, sino que se enclavan en zonas concretas. De ahí que se proponga el uso «de bibliotecas», y en este caso «teniendo en cuenta que deben abrir en agosto», y «los colegios e institutos». Sin embargo Educación ha elaborado un protocolo contra las altas temperaturas que los descarta como refugios climáticos enviando al alumnado a casa con clases telemáticas dadas las condiciones de las infraestructuras como ha reconocido el consejero Poli Suárez.
Repartidos «por todo el territorio»
Los refugios climáticos se deben distribuir bien por el territorio, dice la experta. También es necesario construir más parques. «Los más bonitos se suelen situar en las zonas de rentas más altas de la ciudad mientras que donde se concentran las rentas más bajas suele haber una mayor aglomeración de viviendas y más cemento. Plazas en lugar de parques, y ahí aumenta el fenómeno de la isla de calor. Así que la disposición de los refugios climáticos es clave especialmente para las zonas de rentas más bajas, que es donde las familias no pueden permitirse climatizar su hogar», advierte la científica.
Además, añade la investigadora, «sería interesante que haya unos corredores verdes que conectasen los refugios entre sí o para poder pasear de forma agradable».
«Hay que reverdecer las ciudades. Medellín logró bajar dos grados su temperatura»
Noelia Cruz
omité de expertos que asesora al Gobierno canario para el Cambio Climático
Noelia Cruz recuerda que en las islas el clima está cambiando y que el pasado octubre, por primera vez, se suspendieron las clases por calor. Los colegios son infraestructuras críticas porque «los niños y las personas mayores son quienes más van a sufrir estos golpes de calor», asegura. Sin embargo en la mayoría de los centros los patios no disponen de sombras. «Hasta ahora nuestro clima era subtropical, con una temperatura estable, pero si vamos a perder eso habrá que cambiar el concepto. Si vamos a tener altas temperaturas hay que tenerlo en cuenta en las viviendas y en los colegios, habrá que ponerle remedio». Hay, aconseja, «que reverdecerlo todo. La ciudad de Medellín logró bajar dos grados su temperatura al reverdecerla. Reverdecer tiene muchas ventajas, no solo que bajen las temperaturas sino que hace más agradable la vida en la calle».
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Para naturalizar espacios, añade la científica, «hay que darle prioridad a las especies autóctonas y no plantar árboles de fuera porque crecen rápido porque sería una incoherencia ya que supondría un detrimento de los recursos hídricos. Nuestras especies ya están acostumbradas a tener poca agua», explica. Por esa «incoherencia» también lo ideal sería que los edificios públicos que se utilicen como refugios climáticos deberían utilizar fuentes de energía sostenible y no fósiles.
La experta reconoce que hasta hace pocos años el urbanismo no era consciente del cambio climático. Es más, dice, «se apostó por un modelo de avaricia, de coger todo lo que puede del territorio. Hoy se apuesta por infraestructuras integradas, se evalúa el impacto ambiental. Por eso ahora para Canarias es más fácil reverdecer espacios exteriores y utilizar edificios públicos que apuesten por el autoabastecimiento» como refugios climáticos. «Lo que se va a ofrecer a la ciudadanía lo va a reclamar», dice convencida.
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