Ventanas interiores

Ultramar ·

Todas las miradas han de ser bienvenidas, si de conseguir una ciudad más amable se trata

Sábado, 26 de diciembre 2020, 09:11

El proyecto 'Ventanas Interiores' (ventanasinteriores.com), dirigido por Pablo Vilas y Josué Hernández, es una sugerente propuesta que persigue crear un mapa diferente de Las Palmas de Gran Canaria, por la vía de la colaboración, con piezas audiovisuales (un plano fijo de no más de dos minutos) de género documental, con el propósito, según ellos mismos exponen, de que entre aire fresco en el imaginario colectivo de la ciudad con el cine como catalejo, para asomarnos a nuevos espacios de representación de la capital.

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La iniciativa, activada en estos tiempos de pandemia, pretende estimular un pensamiento crítico y reflexivo sobre la urbe, sus habitantes, ser un soporte para la memoria audiovisual y el imaginario colectivo; un punto de encuentro para miradas artísticas y alternativas sobre un mismo territorio; visibilizar la vida de los barrios periféricos y desplazar la producción audiovisual hacia el extrarradio urbano, pero, también, entregar una herramienta a las comunidades vecinales para que puedan compartir su propia mirada, además de fomentar el tejido profesional del sector audiovisual canario.

Sin duda, un instrumento más que atractivo en un época en la que las limitaciones de movilidad, a cuenta de la crisis sanitaria, invitan a conocer mejor lo cercano, cuando hasta la fecha acostumbramos a mostrar más predilección por lo foráneo que por lo propio, ya que en ocasiones la rutina y la cotidianidad hacen que olvidemos el patrimonio cultural, histórico, artístico y de sus gentes de nuestros lugares de residencia.

Miren por donde la pandemia nos puede hacer tomar conciencia de hasta qué punto habíamos desconectado del entorno inmediato, que es a fin de cuentas, el pilar de la vida cotidiana; por eso conviene que estos empeños cobren cuerpo y fuerza y, más aún, sean considerados por quienes diseñan, las más de las veces desde la burbuja del poder, la ciudad de futuro, esa, como la capital grancanaria, que aspira a lograr 1.200 millones de euros de la Unión Europea para convertirse en una urbe sostenible, pero que solo podrá serlo realmente si es con el sentir y la autoestima de sus paisanos. Y está claro que ahí, por el momento, arrastramos importante debes.

De planes estratégicos de futuro están las estanterías de las instituciones públicas llenas, por eso, para que no continúen siendo un brindis al sol, todas las miradas han de ser bienvenidas, si de conseguir una ciudad más amable se trata.

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