Días felices en el Spar Guerra del Río
Son días felices en el Spar Guerra del Río, bote que hace una semana se hizo con el Trofeo 110 Aniversario de la Vela Latina en Gran Canaria. Su triunfo pone fin a más de cinco años de sequía, tras aquel lejano Torneo de La Caja que alzó en 2009. Y, lo que es más importante, le proyecta para lo que viene con una fuerza arrolladora.
Toda la tripulación del Guerra del Río ha vivido una semana repleta de sensaciones inigualables. Su gesta de imponerse al Puerto de La Luz el pasado sábado, tras tomar la salida en Bocabarranco y completar el recorrido de balizas de manera ejemplar, le ha puesto en boca de todos en el Muelle Deportivo. Es una satisfacción justificada, que recompensa un sacrificio silencioso y pertinaz durante largo tiempo, como bien reconoce Tino Cebral, uno de sus dirigentes.
«Hemos logrado coger el impulso que necesitábamos para afrontar el futuro con optimismo y ambición. Honestamente, pienso que merecíamos de una vez la alegría que nos llevamos. Así lo ha reconocido la familia de la vela latina y así lo sentimos», expone. Cebral incide en lo especial de la ocasión por tratarse de una convocatoria llena de connotaciones simbólicas: «Para todos los que amamos este deporte, ya es un privilegio poder participar en un trofeo que celebra que la vela lleva más de un siglo en nuestro litoral, palabras mayores. Si encima, vas y lo ganas con toda la emoción que conllevó la jornada, pues no se puede pedir más».
Rearmados anímicamente con vistas al futuro, el ambiente en el bote, desde hace once años con el apoyo decidido de Spar para apadrinarlo, mantiene sus señas de identidad, basadas en el compañerismo, la deportividad y el afán de superación. Todo lo que resta por cubrir en el calendario lo van a encarar con el impulso que les ha proporcionado volver a verse en lo más alto, con los brazos mirando al cielo y recibiendo todo tipo de felicitaciones y consideraciones de los otros botes, con los que mantienen lazos casi fraternales... Hasta salir al mar.