Las exigencias de descarbonización lastran a Canarias frente a otros destinos competidores

El sector hotelero de Canarias afronta actualmente un momento clave para garantizar el éxito y la continuidad de las islas como un destino turístico referencia a nivel europeo e internacional.

Tras unos años muy complicados por la pandemia, desde 2022 la curva de beneficios ha sido ascendente para el turismo regional, favorecido por el cambio de tendencia del consumidor y la migración de turistas a causas de conflictos bélicos como el de Oriente Medio.

Sin embargo, el sector hotelero es consciente de que esta curva no es infinita y que existen otros destinos que están pujando muy fuerte para arrebatarle a Canarias una gran parte de su cuota de mercado.

En un debate hotelero organizado por el Grupo VÍA este jueves, y que contó con la participación de las grandes cadenas de la comunidad, Juan Francisco Hernández, responsable del Grupo Barceló en Canarias, opinó que en su estrategia de desarrollo para el destino, el Gobierno canario debe empezar a priorizar la potenciación de la oferta turística por encima de otras cuestiones como la sostenibilidad y la descarbonización, que sin dudar de su importancia y necesidad, representan un ínfimo porcentaje de CO2 que se emite a la atmósfera, en comparación con lo que emiten grandes países como Estados Unidos, China o Rusia.

Según el directivo del Grupo Barceló, el foco debería estar situado en adecentar las zonas colindantes a los hoteles como pueden ser los centros comerciales, «que están de pena», acondicionar los jardines, eliminar la suciedad y la inseguridad en las calles.

Además, mostró su descontento con la rigidez de la administración en comparación con otros destinos como Marruecos, en los que asegura, se está realizando una inversión multimillonaria en infraestructuras, en conectividad (vuelos diarios con Nueva York), y una apuesta por el turismo de lujo que «aquí no podemos ni soñar», que se suma a su también buena gastronomía, cultura y playas. «O hacemos algo pronto o nos van a comer», subrayó.

Sobre uno de los principales debates que rodea Canarias, Hernández señaló que el ser una economía basada en los servicios, ha causado un estancamiento de la productividad, a diferencia de otros sectores como el industrial en donde la tecnología ha permitido recortar los tiempos de producción. En la mayoría de los servicios el tiempo dedicado a las tareas apenas ha variado en las últimas décadas pero los costes sí se han incrementado teniendo que subir precios para poder mantener sus márgenes, causando un «estancamiento de la productividad, que está claramente ligada a los salarios».

De la misma forma, el conjunto de la mesa de debate, con representación del Grupo Lopesan, Cordial, Ona Hotels, Satocan y Gloria Palace, consideran que herramientas como la inteligencia artificial, lejos de ser un riesgo que pueda destruir empleo, es una gran oportunidad para incorporar una herramienta que mejore la productividad no solo de los hoteles, sino de todo el sector servicios. «Solo así se conseguirán mejorar los sueldos», aunque aseguran que el sector hotelero está muy por encima de la media de la región en ese departamento.

Según Mariluz Fraile, directora general del Grupo Satocan, también es fundamental encontrar no solo proveedores que ya incorporen en sus procesos la inteligencia artificial sino encontrar nuevas vertientes de negocio que permitan generar nuevos ingresos, «acortando el panel de consumo e intentar llegar mejor al cliente».

Según Fraile, con un absentismo cada vez mayor, y el hecho de que cada vez menos gente quiere trabajar en los servicios, todo lo que sea facilitar la labor de los empleados, con un trabajo «más fácil», con toda la información a su alcance y automatizada gracias a la IA, es el camino para seguir dando un buen servicio en una era donde «los recursos humanos cada vez son más complejos».

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