Los fondos Next Generation pasan sin pena ni gloria por la licitación de obra pública en Canarias

Los fondos Next Generation no se dejaron sentir en la licitación de obra pública en el archipiélago el pasado año 2023. La inversión se incrementó un 1,19% - en 13 millones de euros- en el archipiélago pese a la abultada cuantía de estos fondos europeos que sí han dinamizado el sector de la construcción en otras comunidades autónomas españolas.

Para la presidenta de la Asociación de Empresarios de la Construcción y Promotores (AECP),María de la Salud Gil, ese crecimiento prácticamente nulo viene a evidenciar la «incapacidad de la administracion pública de las islas». «Si hay mucho dinero para ejecutar y no se hace demuestra una incapacidad absoluta de las administraciones públicas para gestionar el dinero público», indica Salud Gil.

En concreto y, según los datos de la AECP a cierre de 2023, la licitación en obra pública ascendió a los 1.137 millones de euros, solo 13 millones de euros más (+1,19%) respecto a los 1.124 millones del ejercicio 2022. «Está claro la licitación se encuentra en encefalograma plano», señala Salud Gil, que además del «exiguo incremento» de la inversión en un año con millones de euros en fondos europeos pone de relieve que, si a los 1.137 millones de euros alcanzados se le descuentan los casi 100 millones de las obras que quedaron desiertas, el incremento se convierte en descenso. «No invierten y cuando lo hacen sacan las obras por debajo del coste o no actualizan los precios y se quedan desiertas. Hay una perversión clara en la obra pública», indica.

Como dato curioso en la evolución de la licitación en 2023, destaca el aumento de la inversión en los meses próximos a las elecciones autónomicas y locales que se celebraron el pasado año, en concreto en marzo, abril y mayo. En el caso de la administración autonómica -el Gobierno de Canarias- la inversión repuntó en ferero del pasado año un 243% y un mes más tarde, en abril se disparó un 1.000% , hasta alcanzar la cifra de los 84,6 millones de euros, la más elevada del ejercicio. El Gobierno de Canarias registra otro incremento abultado en septiembre y octubre, de un 112% y un 416% respectivamente, debido a la proximidad del cierre del ejercicio y la necesidad de sacar los fondos pendientes.

En el caso de las administraciones locales, ayuntamientos y cabildos, el repunte fue de casi de un 85% en marzo del pasado ejercicio, hasta los 128, 2 millones de euros, el tope máximo del año. «La licitación pública es un duermevela, apenas crece en 2023 y si hay incrementos son interesados porque se acercan elecciones», critica Salud Gil.

La inyección que sufre la obra pública en los meses preelectorales provocó que en los meses de febrero, marzo y abril de 2023 se invirtieran en el conjunto de la región y por todas las administraciones 173, 158 y 120 millones de euros respectivamente frente a unas cifras el resto de meses que rondan los 50 millones de euros (salvo los últimos meses del año cuando se aceleró para sacar a última hora los fondos pendientes).

La evolución de la inversión en Canarias fue desigual por provincias. En Las Palmas se invirtieron 570 millones de euros, un 3,2% más que un año antes mientras que Santa Cruz de Tenerife la licitación ascendió a 562 millones, tras caer un 1,5%, según los datos que maneja la AECP.

Por administraciones, fue la local (ayuntamientos y cabildos) los que movilizaron mayor candidad de fondos, con 700,8 millones de euros, con un alza del 4,3%. Ellas acaparan seis de cada diez euros que se invirtieron en 2023. A continuación se situó la administración autonómica, con una inversión de casi 245 millones de euros, con una caída del 10,51%.

Finalmente se sitúa la administración central con un desembolso en el año 2023 de 191,7 millones de euros, lo que supone un 7,3% más que un año antes. Noviembre fue el año con mayor volumen de licitación por parte del Estado, con más de 21 millones de euros.

Los ayuntamientos son los grandes protagonistas de las obras desiertas de Canarias y se convierten en las administraciones más remolonas a la hora de actualizar los precios de los contratos y elevar los precios de los pliegos para adaptarlos a la realidad del mercado.

En el período 2021-2023 en Canarias se quedaron desiertas 476 obras por valor de casi 230 millones de euros. Los ayuntamientos estuvieron detrás de 232 de estas obras, por un importe de casi 103 millones de euros. Muy por debajo se situaron los cabildos, con 71 obras desiertas y un importe de 38,4 millones de euros. El Gobierno de Canarias también registró 69 obras que quedaron en el aire por valor de 34,2 millones de euros mientras que el Estado dejó sin sacar adelante 61 proyectos por 34,7 millones de euros, según se concluye de los datos que maneja la Asociación de Empresarios de la Construcción (AECP).

Por lo que respecta a las provincias, es la de Las Palmas la que más sufre el problema de las obras desiertas. En el período 2021-2023 se quedaron en el aire 272 obras por valor de 136 millones de euros frente a los 204 proyectos de Santa Cruz de Tenerife por un importe de 93,8 millones de euros. Todas las administraciones registran descensos en las obras desiertas entre 2023 y 2022 salvo el Estado, donde se registra un ligero incremento.

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