«Si a estas familias les quitas el sustento, ¿en qué quedan?»
Para la doctora en Ciencias Económicas y Empresariales Rosa Rodríguez, la ley de vivienda vacaional traerá más pobreza
Aunque el 91,58% de las plazas hoteleras y el 94,05% de las extrahoteleras se concentran en los 13 municipios turísticos de Canarias (Adeje, Antigua, Arona, Guía de Isora, La Oliva, Mogán, Pájara, Puerto de la Cruz, San Bartolomé de Tirajana, Santiago del Teide, Teguise, Tías y Yaiza) y en Las Palmas de Gran Canaria, el 33,83% de las viviendas vacacionales están distribuidas en 74 municipios de la geografía regional. Esto evidencia una mayor dispersión de este tipo de alojamiento en comparación con las opciones tradicionales. De hecho, en estas zonas, las viviendas vacacionales constituyen el 70% de la oferta disponible, mientras que los hoteles representan solo el 24%.
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Todos esos datos arroja el estudio realizado por el Colegio de Economistas de Las Palmas, que señala que el 65% del total de las viviendas vacacionales se concentran en los 13 municipios turísticos de Canarias y Las Palmas de Gran Canaria. En estos núcleos los ingresos por alojamiento generados representaron en 2023 el 72,22%.
Para la coordinadora del informe y doctora en Ciencias Económicas y Empresariales, Rosa Rodríguez, en una comunidad autónoma donde la economía «cada vez va a peor, donde tenemos 750.000 personas en el umbral de la pobreza, si a esta tipología de propietarios le quitas una parte de su sustento, ¿en qué va a quedar la economía canaria?». En realidad, para Rodríguez más que un negocio, la vivienda vacacional supone para muchas familias un modo de subsistencia.
Además, no hay grandes tenedores (el 89,07% de estas viviendas está en manos de pequeños y medianos propietarios), por lo que «no se comprende» la ley que articula el Gobierno de Canarias, a la que califica como «poco argumentada» y que parece «prácticamente una moratoria turística».
Además, el problema habitacional nada tiene que ver con este subsector. En Canarias ahora mismo «hay 200.000 viviendas vacías y solo 25.000 personas demandantes» registrados, pero claro, «no hay confluencia entre la oferta y la demanda».
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