La Policía Local más precaria
Arrecife. La situación del cuerpo es desoladora, con una comisaría insalubre, que se cae a trozos, sin coches patrulla, ni emisoras, y pese a ello se recorta el presupuesto
75.000 euros es el presupuesto para la nueva comisaría, una partida «ridícula» según los sindicatos, otros 10.000 para gastos diversos y 109.000 para uniformes, es el gasto para 2020.
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La situación que vive la Policía Local de Arrecife es ya insostenible. Tras muchos años de dejación y abandono el cuerpo atraviesa uno de los momentos peores por falta de medios materiales y humanos y otras carencias, que a su vez hacen que el abandono del cuerpo policial se traslade a la ciudad y a los barrios, cuyas cuotas de inseguridad son ya muy preocupantes.
A la quema de contenedores, algo ya habitual, ahora se suman cada vez más la quema de vehículos, incidentes y peleas en las calles los fines de semana, consumo de droga en los barrios e incremento de la delincuencia.
Lo denunció este miércoles el grupo de Coalición Canaria (CC) en la oposición, a través de una nota acompañada de abundante material gráfico, que relata con claridad cual es la situación del cuerpo policial, pero también lo denuncian los sindicatos, como Intersindical Canaria, cuyo portavoz, Andrés Martín, señala que «la Policía Local de Arrecife vive su pero momento y que es el patito feo de todos los departamentos municipales, el más abandonado».
Desde CC se alerta de que la actual comisaría «no cumple las condiciones de salubridad, ni para los profesionales ni para los vecinos que acuden a denunciar».
Según el citado sindicato, en la actualidad «no hay ni un solo coche patrulla, al menos hasta ayer noche» y se patrulla con coches denominados «camuflados», que son vehículos normales, sin reunir las condiciones para un servicio, ni si quiera garantiza la seguridad de los agentes, al ser vehículos sin mamparas para proteger de detenidos y con muchas otras carencias. En total se patrulla con tres vehículos normales, sin rotular y uno perteneciente al departamento de Vías y Obras.
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También existe una carencia de emisoras, solo hay 4 o 5 en funcionamiento, y las pocas que funcionan, a veces no tienen cobertura. Lo correcto sería contar con un mínimo de 27 emisoras, tres por cada uno de los tres turnos de trabajo, mañana, tarde y noche, una por agente. Esto hace que los propios policías tengan que usar sus propios teléfonos.
La comisaría también carece de equipos informáticos, solo hay un único ordenador para toda la plantilla (70 efectivos), para hacer informes, diligencias, pedir días libres y otros trámites. Las cámaras de vigilancia de la ciudad no están operativas, lo que se asocia a la constante quema de contenedores y coches. A ello se unen unas instalaciones abandonadas y sin mantenimiento. No hay contrato de grúa lo que impide que por las tardes, noches y fines de semana esté operativo el servicio.
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A pesar de tantas carencias, el presupuesto se reduce respecto a otras áreas. CC señala que a pesar de no haber fiestas, se aumenta la partida de Festejos cuando las fiestas están suspendidas y, en cambio, la de la Policía se reduce de forma importante.
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