La emergencia psicológica no seguirá en La Palma si no hay recursos
El Colegio de Psicología de Santa Cruz de Tenerife insiste en la necesidad de que a este colectivo se les remunere porque, de lo contrario, «difícilmente» se podrá mantener esta ayuda.
efe
Santa Cruz de La Palma
Viernes, 8 de octubre 2021, 12:29
La emergencia psicológica que ha provocado la erupción volcánica en La Palma se mantendrá en el tiempo, pero si no hay remuneración para los profesionales que la prestan hay dudas de que se pueda ofrecer, ha dicho a Efe Carmen Linares, decana del Colegio Oficial de Psicología de Santa Cruz de Tenerife.
Los profesionales del Colegio de Psicología de Santa Cruz de Tenerife ha insistido en la necesidad de que este colectivo esté presente en los planes de emergencia, así como de que de alguna manera se les remunere porque, de lo contrario, «difícilmente» se podrá mantener esta ayuda.
Los profesionales de la Psicología atienden a personas que necesitan atención continuada en el tiempo, y ayuda de calidad y con garantías, ha destacado Carmen Linares, quien ha añadido que desde el colegio profesional intentan cooperar con todas las administraciones.
Durante la entrevista, Carmen Linares ha mostrado su malestar porque entre las medidas para la reconstrucción de La Palma no se tenga en cuenta la atención psicológica, «con lo decisiva que es».
El colegio de Psicología también asume gastos como los de chalecos y otro material, y ha pedido al presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, que «por favor nos tenga en cuenta, que nos meta en los planes de emergencia y que se remunere a estas personas» para que el servicio se pueda mantener.
Ha explicado que en la atención a las personas damnificadas de La Palma se han encontrado casos «muy» graves, con ideas suicidas porque lo han perdido todo, y ha reconocido que con el Colegio de Psicología se han puesto en contacto desde algunas áreas de la Comunidad Autónoma.
Eso ha sucedido con el Servicio de Salud Mental de la Dirección General de Programas Asistenciales, para ofrecerles que cuando detecten un caso de suicidio puedan dar un traslado directo a las unidades de salud mental.
También se han puesto en contacto con el Colegio de Psicología desde la Dirección General de Juventud porque están preocupados por la salud mental de los jóvenes, y se les dotará de una partida económica para contribuir a la atención de este colectivo.
Y desde la Viceconsejería de Igualdad se han puesto en contacto con el Colegio de Psicología porque hay mujeres que son víctimas de violencia machista y viven situaciones complicadas debido a que están realojadas con sus agresores.
Desde el Cabildo de La Palma también han mostrado preocupación por la situación, ya que entienden que la ayuda psicológica no se puede hacer de forma gratuita, y por ello buscan la manera de hacer un convenio y subvencionar a los profesionales.
Carmen Linares ha comentado «con tristeza» que por parte de los responsables del Gobierno de Canarias no se haya visto «ni siquiera unas palabras de consideración» hacia los profesionales de la Psicología, como sí ha ocurrido con otros colectivos que actúan en la emergencia que tiene lugar en La Palma.
La decana del Colegio de Psicología de Santa Cruz de Tenerife ha insistido en que es preciso que los psicólogos estén representados en los planes de emergencia, y que también estén presentes en los servicios de Atención Primaria.
Algo esto segundo sobre lo que «se hacen anuncios pero así se queda todo», a pesar de que es una «necesidad real», y que si los psicólogos estuvieran en los centros de salud se facilitaría mucho la labor a los ciudadanos que necesitan de su ayuda, y que ahora sólo la reciben si son derivados a una unidad de salud mental.
Los psicólogos quieren estar presentes «de forma más directa» y que los ciudadanos no tengan que esperar seis meses para una primera consulta y otros seis para la siguiente.
Ha opinado que el 10 de octubre, Día de la Salud Mental, sería una buena fecha para hablar de su incorporación a los servicios de Atención Primaria y a los planes de emergencia, y ha subrayado que en la Universidad de La Laguna se dispone de la investigación psicológica y los colegios profesionales tienen a los psicólogos que tratan a la población.
En cuanto a la actuación en La Palma ha explicado que actúan entre 15 y 20 profesionales que intervienen en los municipios de Fuencaliente, El Paso, Los Llanos de Aridane y Tazacorte.
En Fuencaliente están en el hotel en el que se alojan unas 214 personas que han sido desalojadas de sus viviendas, y con ellas se interviene en horario de mañana y tarde.
En El Paso disponen de un espacio en el que se reparte ropa y todo tipo de enseres, y Carmen Linares ha señalado que es un punto de encuentro «muy delicado», debido a que muchas de esas personas es la primera vez que piden ayuda, y están acostumbradas a dar o a intercambiar.
En este lugar han detectado «mucha necesidad» de atención psicológica e intentan que las personas que la precisan normalicen que se trata de una situación anormal y por ello tienen que hacer cosas no habituales.
En El Paso hay otro punto de apoyo, en el que trabajadores sociales atienden a personas que han sido desalojadas o han perdido sus viviendas, y las derivan a los profesionales de la Psicología.
En Los Llanos de Aridane hay dos espacios de atención, uno el pabellón Severo Rodríguez, donde se reparte ropa y enseres, donde las trabajadoras sociales reciben a las familias los profesionales de la Psicología disponen de un despacho.
En este municipio también les han demandado servicios a domicilio, y además están en el terrero de lucha, donde se da de comer caliente a las personas que lo han perdido todo.
También se ofrece intervención psicológica al personal del Ayuntamiento, que está «agotado» sobre todos quienes ocupan puestos de responsabilidad, y Carmen Linares ha subrayado que muchas personas son damnificadas y a la vez ayudan.
Y en Tazacorte, que al principio no era una zona afectada, se ha abierto un punto de ayuda una vez que la lava del volcán ha destruido 52 viviendas, y además el Ayuntamiento ayuda a las familias de los pescadores, que han dejado de faenar y carecen de ingresos.
De forma paralela, el Colegio de Psicología de Santa Cruz de Tenerife tiene un dispositivo telefónico para atender a personas de otros municipios, que es «muy usado» y que atienden más de 60 profesionales.