La soledad encuentra acompañantes en Valleseco

A nadie se le escapa el envejecimiento poblacional que viven municipios como Valleseco. De los 3.740 habitantes que tiene la localidad cumbrera, 1.021 (549 mujeres y 472 hombres) son mayores de 65 años, y otros 68 (42 mujeres y 26 hombre) sobrepasan las nueve décadas. Esta es la razón de que este colectivo, el 27% de la población, se haya convertido en una prioridad a nivel social y político para el grupo de gobierno del Ayuntamiento vallesequense, que desde hace años viene trabajando para atender sus necesidades.

La creación de empleo a través del Programa de Formación en Alternancia con el Empleo (PFAE) Asistencial sociosanitario ha sido la clave para que jóvenes que antes emigraban a otros municipios para tratar de mejorar su situación laboral, hoy se hayan convertido en los cuidadores y acompañantes de sus mayores y personas dependientes sin abandonar su entorno familiar.

Alumnos como Arminda Arencibia Quintana, que está realizando sus primeras prácticas, son la prueba de esta profesión emergente que se ha hecho «tan necesaria» en los últimos años y que, en este caso, cumple con el objetivo del gobierno local de llegar a todos los rincones donde sea necesaria. «No solo les acompañas, también, es un aprendizaje bidireccional porque te cuentan anécdotas de su juventud o costumbres que tienen que ver con donde vivimos. Personalmente, estoy my contenta con lo que me depara el futuro después de este aprendizaje», señala la futura auxiliar.

Esta joven es una de las 15 personas del municipio que en estos momentos realizan sus prácticas profesionales en ayuda a domicilio, la residencia de mayores, centro de día, centro ocupacional, servicio de estimulación cognitiva y acompañamiento domiciliario. Otros 60 profesionales de las cuatro últimas convocatorias ya están en el mercado laboral, «muchos se han quedado en Valleseco y cuidan de nuestros mayores en centros o domicilios», señala Daniel Calvo Sánchez, director del PFAE.«Estamos muy satisfechos con el resultado de los programas», incide Calvo, que hace hincapié en que diez personas están en lista de espera, en concreto, para acompañamiento domiciliario en el municipio, donde tenemos «un problema enorme con el envejecimiento», recuerda.

Estos auxiliares en formación llenan con su compañía los momentos de soledad de María Teresa (95), Cándido y Santiago (94 años) que acuden a diario, de lunes a viernes y de 08.00 a 16.00 horas, al centro de día en transporte adaptado junto a otros doce mayores, muchos de ellos residen en Valleseco pero también en Firgas y Teror, para realizar actividades de estimulación cognitiva y físicas. «Aquí no se aburre uno. Yo solo quiero hacer cosas como cantar y bailar que me diviertan porque ya hay tiempo de desgracias», comenta Juanita. Cándido y Santiago se entretienen además, jugando al ajedrez o participando en los festejos y eventos que se organizan en el pueblo.

Para Agustín (49 años), Luis (45 años) y Juan Luis (41 años) no hay impedimentos que no superen con la autonomía que trabajan en el centro ocupacional, mientras que María Teresa (78 años), que enviudó recientemente, evita la soledad con el acompañamiento domiciliario que recibe durante hora y media cada día, de lunes a domingo, en su casa en el barrio de Las Carpinteras.

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