PSOE y PP cumplen el pacto y Sergio Nuez toma el relevo en la alcaldía de Teror
No hubo sorpresas. El ya nuevo regidor fue elegido este sábado con los 10 votos de los ediles de la alianza de gobierno. NC recordó que su lista fue la más votada
El guion se cumplió según lo previsto, sin sorpresas, y el PSOE cedió este sábado la alcaldía al PP en un pleno extraordinario en el que el popular Sergio Nuez Ramos tomó el relevo del socialista Gonzalo Rosario. Los dos partidos que conforman el gobierno local cumplieron así con el acuerdo que firmaron en 2019, en virtud del cual pactaron que se alternarían al frente de la nave a mitad de mandato.
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Nuez, que fue elegido por los 10 votos de los concejales de PSOE y PP, mayoría suficiente en un pleno de 17, será ahora regidor durante dos años. Hubo un voto en blanco, emitido previsiblemente por el concejal no adscrito Antonio Rodríguez, ex de NC, y cuatro votos a favor de la candidata de NC, Isabel Guerra, que se corresponden con los ediles que siguen en su grupo. En realidad, debieron ser cinco, pero uno de ellos no acudió a la sesión. Tampoco fue el representante de Podemos, Francisco López.
Apenas 14 minutos después de que empezase el pleno se dio por oficial el relevo entre aplausos en una sala sin público, apenas unos pocos familiares del nuevo alcalde, en aplicación de los protocolos que impone la pandemia. Los mayores vítores llegaron desde abajo, desde la planta baja, a la que dejaron entrar a los cargos público y altos cargos del PP que acudieron a arropar a Nuez.
Entre los asistentes, todos, o casi todos, los alcaldes del PP en la isla; Australia Navarro, presidenta regional del partido, Poli Suárez, presidente insular de esa formación, el líder del PP en el Cabildo, Marco Aurelio Pérez, el senador Sergio Ramos y la diputada nacional Auxiliadora Pérez.
Con todo, el estruendo de la traca que le tenían preparada en la plaza al nuevo alcalde sonó justo después del traspaso simbólico del cargo, cuando Rosario le entregó el bastón de mando. El regidor saliente aprovechó el momento para, dirigiéndose a Nuez, recordar que no es cierto que la mayoría en el pleno sea la de NC, sino la que han sumado PSOE y PP para formar gobierno. Luego se le olvidó que ya no era al alcalde y hasta levantó la sesión, pero se corrigió sobre la marcha. Faltaba el discurso de Nuez.
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El flamante primer edil, que se puso bajo el amparo de la Virgen del Pino, agradeció a Rosario «la responsabilidad» y la «estabilidad política» compartida en estos dos años, y también dio las gracias al PP por haber confiado en él, a los ciudadanos de Teror y a su familia. E hizo un llamamiento a la oposición, a la que pidió «mayor entendimiento y comunicación, dialogo y cooperación», y una fiscalización «sustentada en la verdad y en las buenas intenciones, no en el insulto ni en la manipulación de la realidad». Tuvo palabras para los afectados por la pandemia y la crisis económica derivada, para Aguas de Teror y para el personal del Ayuntamiento Y respecto a su gestión, prometió que trabajará para que en Teror «impere el diálogo, el consenso y la colaboración» y subrayó que lo encontrarán «a pie de calle», con una «actitud de escucha». El servicio público, dijo Sergio Nuez, es su vocación.
Por lo pronto, el edil no adscrito Rodríguez Batista sí le tendió la mano, aunque le anunció que seguirá haciendo oposición y fiscalizando. Sin embargo, Isabel Guerra, de NC, le recordó que el partido que ella representa fue la primera fuerza política, con 6 concejales, tras las elecciones de 2019. «La población pidió un cambio y ustedes no lo han respetado, les pasará factura». Atribuyó que no le dejaran gobernar a «un pacto inconfesable que tiene más que ver con intereses personales que generales». Con todo, centró sus reproches en los socialistas, que fueron sus socios de gobierno en una parte del mandato anterior. «El PSOE, que hoy lleva la mascarilla con la rosa puesta, tiene mucho que bajar los ojos y la cabeza en cuanto que le dan la alcaldía a un cargo del PP de la derecha más rancia y más machista que pueda haber».
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Rosario, por su parte, ofreció a Nuez «el mayor de los esfuerzos, el compromiso y la lealtad», de él y de sus concejales, para seguir con un pacto «que está siendo muy positivo para el municipio».
Nada más acabar la sesión, el ya nuevo alcalde, a preguntas de los periodistas, confió en que los terorenses no noten mucha diferencia entre su etapa como regidor y la de estos dos años, porque, al fin y al cabo, este fue un pacto a cuatro años. Por su parte, él ofrece todo su esfuerzo y un rasgo que, según indicó, le caracteriza. «La gente sabe como soy yo, muy cercano, por eso quiero que llegue mi cercanía a todos los vecinos y vecinas de Teror. Lo que más quiero es menos oficina y más calle, y atender y escuchar a los vecinos».
Por lo demás, anunció continuidad. «Seguiremos trabajando como siempre, al unísono, Gonzalo y yo, su equipo y mi equipo, para que Teror siga manteniendo estabilidad política». E insistió en que este no es un mandato de dos gobiernos. «Esta no es una legislatura de dos años con uno y dos años con el otro, porque no sería útil para Teror, sino que es una legislatura de cuatro años».
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Entre lo que queda pendiente, avanzó que seguirán dando pasos en el proyecto de la residencia de mayores y con la calle Nueva, «que es un clamor popular». También anunció actuaciones en el cementerio. Pero, sobre todo, prometió que lo que hará este gobierno «es trabajar por el vecino, a pie de calle, con la camisa bien remangada», recalcó.
Tras la foto de rigor en las escaleras del Ayuntamiento, donde posó con todo su gobierno y también con compañeros del PP en la isla, se fueron a la iglesia para cumplir con la tradición y encomendarse a la Virgen del Pino. Pero este año Nuez introdujo una novedad. Anunció que, en cumplimiento de una promesa, estos dos años no llevará el bastón de mando cuando acuda a las fiestas del Sagrado Corazón de Jesús en Arbejales. Lo portará la imagen.
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