La excavación de Chira-Soria generará 775.000 metros cúbicos de excedentes

La excavación de los túneles, zanjas, conducciones, galerías y caverna de la central hidroeléctrica de Chira-Soria generará, incluso después de la reutilización en la propia obra, un excedente neto de 775.000 metros cúbicos de tierras y rocas (635.0000 en la zona de Soria 140.000 en la de Chira), según el proyecto final de obras registrado por Red Eléctrica de España (REE).

No es de extrañar, solo la caverna subterránea que alojará la central en sí tiene una longitud de 106,10 metros. Y es que los equipos de generación (turbinas y generadores), los transformadores y la subestación eléctrica se ubican en una cavidad única, con los equipos dispuestos longitudinalmente. Un muro separa las dos partes. La de grupos tiene 81,05 metros de longitud y la de transformadores tiene 79,05 metros.

La caverna de grupos albergará 6 grupos reversibles turbina-bomba tipo Francis de eje vertical de 33 MW (modo turbina) y 36,7 MW (modo bombeo) con velocidad variable y la triple finalidad de incrementar la generación renovable, optimizar el rendimiento a cargas parciales y mejorar la capacidad de regulación primaria del sistema insular.

Con 17,65 metros de ancho y 33,29 de alto, el interior se divide en 5 plantas, en la que se sitúan, de arriba abajo: el acceso desde el túnel de acceso principal a la central, los generadores y equipos, las turbinas y sus sistemas auxiliares, las válvulas de guarda de las turbinas y la galería de drenaje.

La de transformadores aloja la subestación eléctrica, tiene 24,19 metros de ancho y 24,89 de altura máxima y se dividen por dentro en 4 niveles. De arriba abajo son: el que albergará los transformadores (6 por grupo), la sala en la que se localizan los convertidores, sus elementos auxiliares y parte de la sala de control, el piso que aloja los servicios auxiliares (transformadores, cuadros de acometida general, baterías, rectificaciones de corriente y celdas de media tensión) y los equipos de refrigeración de la caverna y, por último, el nivel inferior, que alberga las válvulas de mariposa y la galería de drenaje que desagua los caudales recogidos en la caverna.

Con la orden de no detener las excavaciones una vez que se pongan en macha, por lo que se prevén tres turnos de trabajo para cubrir las 24 horas de los 7 días de la semana, el proyecto de construcción propone la creación de tres polvorines que garanticen el suministro de explosivos previsto en las obras.

La limitada infraestructura de transporte de explosivos en la isla y el que los trabajos se realizarán sin interrupción «obliga a disponer de un stock para evitar la paralización de los trabajos de excavación», señala la memoria del proyecto.

Los tres polvorines se acondicionarán anexos a plataformas de obra (Soria, estación de bombeo II y Cañada de la Umbría), tendrán una capacidad unitaria máxima de 9.000 kilos de explosivos y cada uno contará con 4 depósitos auxiliares para detonadores con una cantidad máxima de 2.000 unidades.

Los polvorines «cumplen las distancias reglamentarias mínimas a núcleos de población, viviendas aislada, lugares turísticos y carreteras», asegura el documento. Contarán con defensas, cercados perímetrales protección contraincendios y parrarayos, y se desmontarán una vez que se completen las obras.

En cada uno de los 4 túneles del proyecto está previsto realizar un máximo de 2 voladuras diarias (8 al día), en los 4 pozos está prevista 1 (4 al día en total) y en la galería central de avance del primer nivel de la caverna se prevén 3 diarias (variable en función de la dureza de la roca y de los materiales a excavar). Así resulta un consumo diario máximo de 3.985 kilos de explosivos y de 801 detonadores.