Jurados en la nueva normalidad
La Sección Sexta celebrará desde este próximo lunes el primer juicio con jurado popular de la nueva normalidad en la provincia de Las Palmas. La magistrada Oscarina Naranjo será la presidenta de un procedimiento que sienta en el banquillo a cinco personas acusadas del asesinato del italiano Davide Fervorini –que regentaba un club de cannabis en La Isleta y apareció muerto el 16 de septiembre de 2018 en Barranco Seco– y también pide cárcel para otro miembro más de esta presunta banda por el delito de tráfico de drogas.
Será el primer jurado popular con las medidas de seguridad que impone el Covid-19, por lo que la sala de vistas se ha adaptado con mamparas entre todos los miembros del jurado, el tribunal y las partes, además de el aforo reducido para que haya distancia de seguridad entre el público, prensa y policía. También la sala de deliberación contigua se ha transformado con mamparas de seguridad entre los nueve jurados titulares y los dos suplentes, en un juicio que comenzará el lunes y se prolongará hasta el final de semana.
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En este caso, la fiscal María Eugenia Rodríguez acusó a la brasileña Sophia Valinhas G. B. M., Alejandro A. S. y Wilson Enrique Q. B. por los delitos de asesinato y robo con fuerza en casa habitada, pidiendo para la primera 25 años y seis meses de prisión y 28 para los dos restantes. Mientras, Rubén P. S. y Adonay Santiago G. C. también han sido acusados por los mismos delitos además de otro contra la salud pública en la modalidad de sustancia que causa grave daño a la salud, por lo que la petición de penas se eleva a 34 años y 33, respectivamente. Por último, también acusa a Layonel P. S. por el delito contra la salud pública en la modalidad de sustancia que no causa grave daño a la salud, por lo que interesa una pena de 4 años y seis meses de prisión y el pago de 8.200 euros de multa.
Los cinco primeros acusados deberán además indemnizar, según la Fiscalía, de forma conjunta y solidaria a los herederos de Davide Fervorini, en la cantidad total de 120.924 euros.
Hechos.
La fiscal determinó que Davide Fervorini traspasó su club de Cannabis Ola Verde –de la calle Juan Rejón– a una compatriota el 11 de septiembre por 8.500 euros. A raíz del traspaso, la acusada Sophia Valinhas –que era amiga de Davide– se lo comentó a Adonay Santiago y decidieron robarle el dinero proponiéndole el plan al resto de los acusados Rubén, Alejandro y Wilson Enrique.
El 11 de septiembre, Sophia –según la fiscal–, ya sabía que Davide había traspasado el club por lo que Adonay envió un SMS desde el móvil de ella haciéndose pasar por la misma para quedar con Davide con la intención de «intimar». Se citaron en un alpendre abandonado en Barranco Seco. Sobre las 22.00 horas, los cinco acusados fueron al alpendre y mientras Rubén, Adonay, Alejandro y Wilson se escondieron vestidos con pasamontañas y guantes, Sophia acudió al encuentro de Davide. Al llegar la víctima, Adonay, Rubén, Alejandro y Wilson se abalanzaron sobre él y le hicieron un mataleón hasta que perdió el conocimiento y le propinaron puñetazos, patadas, golpes con un bate de béisbol en todo el cuerpo y lo estrangularon. Luego, cogieron una piedra de grandes dimensiones y se la arrojaron con contundencia sobre la cabeza en, al menos, dos ocasiones.
A continuación, los acusados le sustrajeron las llaves de su casa, el móvil y 100 euros de la cartera del fallecido y, sobre la 01.52 del 12 de septiembre, se dirigieron a casa de Davide para apoderarse de varias plantas de marihuana, un televisor, una barra de sonido y un reloj, «no consiguiendo encontrar el dinero del que pensaban apoderarse».
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El juicio arrancará el lunes con la selección del jurado y la declaración de los acusados y se prolongará durante toda la semana.
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