Intentó quemar, clavar un hacha y tirar por la ventana a su mujer en Guía

El Juzgado de Instrucción número 3 de Santa María de Guía ha acordado la prisión provisional comunicada y sin fianza para un individuo que, presuntamente, quiso acabar con la vida de su pareja lanzándole un machete, intentando tirarla por la ventana y quemando el colchón donde dormía en una casa de la Comunidad La Esperanza, un conjunto de viviendas okupas de dicho municipio norteño.

Viernes, 17 de julio 2020, 03:20

La autoridad judicial decretó esta medida después de que el lunes pasara a su disposición y dispuso además la prohibición de comunicación y aproximación con la mujer por parte del acusado. Según el auto dictado por el magistrado, a este individuo se le investiga por los delitos de homicidio o asesinato en grado de tentativa, amenazas, lesiones, daños en la vivienda e incendio.

Publicidad

Según narró la denunciante, el acusado con el que convivía en una casa okupa, le lanzó un hacha sin llegar a golpearla, intentó tirarla por la ventana sin conseguir tampoco su objetivo y también prendió fuego su cama con el objetivo de quemarla, aunque la mujer consiguió extinguir las llamas con la ayuda de su hija menor de edad, que estuvo presenciando todos estos hechos.

Según consta en las actuaciones, la mujer ya había denunciado con anterioridad a este individuo, que es natural del municipio de Teror.

Tanto la denunciante como su hija, declararon en sede judicial y reconocieron estar muy temerosas y asustadas ese día debido a la violenta reacción del acusado, que ya había protagonizado presuntamente, incidentes incluso con otras personas de su barrio y, más en concreto, de la llamada Comunidad La Esperanza, un proyecto de ocupación desarrollado en el municipio de Santa María de Guía donde residía con la denunciante y la hija menor de ésta.

Tristes precedentes.

Este es el tercer caso grave de violencia sobre la mujer en Gran Canaria desde que se decretara el estado de alarma por la pandemia del covonavirus.

En el primero de ellos, ocurrido a principios de este mes de abril, José P. A. acabó con la vida de su esposa, asfixiándola con una almohada en su vivienda de La Isleta. El suceso tuvo lugar hacia las 7:00 horas del sábado 4 de abril, cuando los sanitarios acudieron a esta vivienda después de que el agresor llamara al 091 de la Policia Nacional. Cuando llegaron los servicios de emergencia, la mujer ya había muerto.

La víctima, E.G.P de 78 años de edad, sufría un deterioro cognitivo moderado/severo, estaba declarada incapaz y el agresor había sido designado como su cuidador, por lo que estaba encargado de su día a a día y de administrarle sus respectivos medicamentos. Además, constaban registradas dos actuaciones previas por parte de juzgados de Violencia sobre la Mujer de Las Palmas de Gran Canaria con dos atestados, uno del año 2008 y otro más reciente de 2019 y en ambos se archivaron los procedimientos. En el último de 2019, la fallecida desde el principio no quiso en ningún momento seguir adelante con las actuaciones, ni cuando la policía fue a su domicilio ni cuando a acudió a sede judicial. Ella manifestó que su marido no le había agredido y que no tenía miedo de él, por lo que el órgano judicial no pudo llevar a cabo ninguna actuación sobre el individuo. Él también negó ante los investigadores ningún tipo de agresión.

Publicidad

El otro procedimiento judicial abierto por un caso grave de violencia machista ocurrió también a principios de mes, cuando el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2 de Las Palmas de Gran Canaria decretó el ingreso en prisión comunicada y sin fianza de un individuo llamado Mohamed. M. B, acusado de haber intentado acabar con la vida de su pareja sentimental asfixiándola, todo ello en unos hechos ocurridos en la capital grancanaria.

El sujeto, que está siendo investigado por los delitos de tentativa de homicidio, maltrato habitual en el ámbito familiar y lesiones y trabajaba de director en un centro de menores inmigrantes en Tejeda, presuntamente atacó en varias ocasiones a su mujer y en una de ellas la cogió por el cuello para estrangularla hasta que perdió el conocimiento. La víctima declaró que sufrió un maltrato continuado por parte del acusado a lo largo de los últimos años, pero nunca se había decidido a denunciar estos hechos.

Publicidad

El auto judicial revela como la víctima relató malos tratos, vejaciones e insultos habituales y expuso que el investigado había estado en tratamiento de deshabituación por alcohol y drogas, aunque había vuelto a beber. Además, contó que la había agredido cuatro o cinco ocasiones en su vida y que una noche en febrero, cuando regresaban de una cena de empresa, en el coche empezó a insultarla y a decirle que no iban a llegar a Las Palmas y tampoco iba a volver a ver su hijo, para luego, coger una rebeca y atársela en el cuello, tirando fuertemente de la misma con la intención de asfixiarla.

En días posteriores, volvió a discutir con ella y la llamó «loca, puta vieja» y la cogió por el cuello fuertemente, le dio una patada en el costado y la tiró al suelo, perdiendo la víctima el conocimiento y orinándose encima. Por este motivo, el acusado llamó a la hija de la denunciante y le dijo que su madre se encontraba tirada en el suelo, que estaba haciendo el paripé y que viniera a la casa.

Publicidad

El relato de la mujer fue corroborado de forma íntegra en sede judicial por su hija y su madre que fue la que realizó la denuncia.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Regístrate de forma gratuita

Publicidad