El fiscal insiste en que Jesús Yeray quiso matar

En su informe final, el fiscal detalló que había quedado probado que Jesús Yeray cogió la cabeza de un martillo de considerables dimensiones y comenzó a perseguir a su cuñado –con el que convivía pero no tenía ningún tipo de relación– hasta la calle «con la decidida intención de acabar con su vida y no para defenderse», narró. Ya en la calle, «le propinó con el martillo varios golpes contundentes en la cabeza que podrían haberle causado la muerte, y una vez que el agredido estaba tirado en el suelo, también le propinó patadas mientras le gritaba que lo quería matar».

Por su parte, la defensa insistió en que la intención de Jesús Yeray no fue acabar con la vida de su cuñado, sino «defenderse» ante la actitud agresiva del denunciante. «Le dio con los puños y tenía en mazo en uno de ellos, pero si le hubiese dado directamente con la herramienta, las lesiones hubiesen sido peores», sostuvo.

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