Vea la portada de CANARIAS7 de este sábado 6 de diciembre de 2025

Ineptitud política persistente

«Los representantes políticos vuelven a demostrar en la crisis del coronavirus que lo que menos les preocupa son los ciudadanos»

Viernes, 17 de julio 2020, 03:19

Silvia Fernández

Publicidad

Esta crisis nos está dejando muchas enseñanzas y al tiempo está dejando al descubierto la debilidad de unas sociedades que creíamos muy seguras. Está claro que de está saldremos y en muchos de los casos con planteamientos vitales y personales diferentes a los que teníamos hace apenas unas semanas.

Una de las enseñanzas que yo, y creo que la mayoría de la población, saco de esta pandemia es la poca cintura política y la elevada ineptitud de la mayoría de los líderes políticos que hoy encabezan los principales países del mundo. Eso echando la vista para afuera. Si miramos para dentro, la crisis del coronavirus vuelve a evidenciar la falta de patriotismo de los líderes de todos los partidos que forman la cosa política de nuestro país.

Ni Pedro Sánchez (PSOE), ni Pablo Iglesias (UP), ni Pablo Casado (PP), ni Inés Arrimadas (Cs) ni Santiago Abascal (Vox) tienen el más mínimo interés por los españoles ni por conseguir una solución eficaz para hacer que la salida a la crisis económica y social que está generando la pandemia del coronavirus sea lo menos dañina para los ciudadanos. En los últimos días al Gobierno se le ha llenado la boca hablando de unos nuevos Pactos de la Moncloa y de un gran acuerdo para la reconstrución económica y social del país pero luego va por libre y mantiene una actitud que nada tiene que ver con la de una persona que busca el acuerdo, el diálogo y el entendimiento.

No puede ser que con la que está cayendo y para unos nuevos Pactos de la Moncloa el líder de la oposición se entere de que se va a reunir con el presidente del Gobierno el día antes y en una rueda de prensa. Eso es inadmisible porque denota la intención de Sánchez de dinamitar desde el minuto uno un posible acuerdo. Y a Pablo Casado tampoco se le permite que, dolido por las formas, decida retrasar esa reunión una semana. Así España no avanza. El líder del PP debería estar por encima de las provocaciones y sentarse en esa mesa para buscar soluciones, le guste o no la manera en la que ha sido invitado.

Publicidad

Eso es lo que quieren y demandan los españoles y lo que políticos con altura de miras, con visión de estado y movidos por el interés general harían. Pero no es el caso.

Aquí todos van a lo suyo y se mueven solo por las ansia de poder y las ganas de llegar a la Moncloa. El resto no les importa en absoluto.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Regístrate de forma gratuita

Publicidad