Tradición.- El oficio de molinero sobrevive en Fuerteventura

El Molino de Tiscamanita funciona en la actualidad como se hiciera hasta mediados del siglo pasado en torno a una de las actividades más importantes de Fuerteventura, la industria del gofio. Recuperado por el Cabildo Insular en 1994 con la puesta en marcha del Centro de Interpretación de Los Molinos, el oficio de molinero se ha mantenido vivo desde entonces, tras haberse extinguido prácticamente el sistema de producción artesanal durante 50 años, con la aparición de los primeros molinos mecánicos.

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