Nombramiento discrecional
José Manuel Soria era el «candidato idóneo» para representar a España en el Banco Mundial, según reiteró este martes el ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, que en sus explicaciones ante el Congreso no asumió ningún error en la decisión y posterior rectificación del Gobierno.
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Había otros perfiles que reunían las condiciones, pero «ninguno como el de Soria». En sus explicaciones sobre el proceso de designación del candidato español a director ejecutivo del Banco Mundial, De Guindos insistió en avalar la idoneidad del exministro de Industria para el cargo pese a haber tenido que dimitir meses antes por su vinculación con los papeles de Panamá. «Su perfil era el más adecuado, no está inhabilitado y no hay decisión judicial contra él». El ministro de Economía en funciones, que finalmente compareció en comisión y no ante el pleno del Congreso como había pedido la mayoría de la Cámara, realizó un relato detallado del procedimiento de elección e insistió en que se trata de un cargo carácter técnico «tradicionalmente» ocupado por funcionarios del cuerpo de técnicos comerciales y economistas del Estado, al que pertenece Soria. «No requiere de aprobación en Consejo de Ministros ni la intervención del Gobierno», expuso, fue una designación de «carácter discrecional» pero en «ningún caso» un nombramiento «político», añadió. Pese a mantener contra viento y marea que era el candidato idóneo para el puesto, De Guindos admitió que tras comprobar con sorpresa la «dimensión política» que adquirió la decisión -anunciada dos minutos después de que fracasara la investidura de Rajoy-, el Gobierno pidió a Soria que renunciara a la convocatoria para frenar las críticas. «Vengo por tanto aquí a dar explicaciones sobre un nombramiento que no se ha producido». De Guindos rechazó que la anulación de la primera convocatoria, que fue cambiada al mes de junio, respondiera a la intención de guardarle el puesto a Soria en compensación por haber dejado el Gobierno para no perjudicar a Rajoy en pleno proceso electoral. «La prudencia aconsejaba esperar para tomar la decisión, convencidos de que para cuando se cumpliera el plazo ya habría nuevo Gobierno», señaló. Respecto al momento elegido para hacer pública la candidatura de Soria, el ministro mantiene que se hizo justo al término del debate Rajoy porque «era cuando se cumplía el plazo». La oposición en pleno rechazó las explicaciones de De Guindos. PSOE y Unidos Podemos pidieron su dimisión por «haber mentido» al decir que la candidatura del exministro de Industria al Banco Mundial se decidió en un concurso público de méritos, que solo estaba abierto a funcionarios y que al cumplir Soria todos los requisitos no proponerlo hubiera sido ilegal, justificación que también mantuvo el presidente del Gobierno en funciones, en la única ocasión que se ha referido al caso, durante su reciente visita a China. Los grupos parlamentarios coincidieron en reclamar responsabilidades políticas por el «grave error» del Gobierno, no porque se cuestione la capacitación de Soria para ocupar el puesto -aunque algún portavoz expresó sus dudas al respecto- sino porque la participación del exministro de Industria en una empresa radicada en un paraíso fiscal lo «inhabilita políticamente» para representar a España.
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