La pobreza duerme en la calle

En Canarias, la pobreza duerme en la calle. Cerca de 20.000 personas de todo el Archipiélago no tienen hogar, según estima Cáritas Diocesana de Canarias, que alerta de que el 80% de la población canaria en riesgo de exclusión social no son atendidas por los servicios sociales.

Cuando alguien dice que en Las Palmas de Gran Canaria no hay personas sin hogar, miente». Así de contundente se manifestó ayer durante la presentación del análisis sobre pobreza y exclusión social del primer semestre de 2015 el director de Cáritas Diocesana de Canarias, Gonzalo Marrero, quien apuntó que la población que no tiene un techo bajo el que dormir se concentra, sobre todo, en las capitales y en las ciudades más pobladas de Canarias.

La ONG, que ayudó desde enero hasta junio a 8.873 unidades familiares y a un total de 27.506 beneficiarios en la provincia de Las Palmas, atendió a 1.119 personas sin hogar, según dijo Marrero, que explicó que se prevé que la cifra se haya duplicado durante el segundo semestre hasta alcanzar las 2.000 personas. Según el director de Cáritas, estos números son similares a las de la provincia de Santa Cruz de Tenerife, donde también se atienden a cerca de 2.000 personas sin casa. Sin embargo, Marrero alertó de que la cifra real es superior y explicó que esto se debe a que sólo el 20% de los canarios en riesgo de exclusión social reciben ayudas de organizaciones sociales, por lo que la cifra de personas sin techo que hay registradas 4.000 en todas las Islas, «podría multiplicarse por cinco» para conocer el total de personas que no tienen casa, «20.000», apuntó Marrero.

El responsable de la organización también alertó de que la vivienda es una preocupación «emergente» y aseguró que ésta será el principal problema de la pobreza durante los próximos diez años. Asimismo, Marrero destacó que la mitad de las unidades familiares atendidas no tienen ningún ingreso y subrayó que unos 800 beneficiarios, incluidos niños, de Las Palmas no saben leer ni escribir.

El director de Cáritas recordó que la desigualdad social ha aumentado once puntos en las Islas en los últimos años, y pese a que apuntó que se ha detectado «una ligera mejoría», dijo que ésta no está siendo percibida por las personas más necesitadas.

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