Juzgan a un médico acusado de dejar a un niño paralítico cerebral

El médico del centro de salud de Mogán Benigno G.N. fue juzgado este miércoles acusado de imprudencia en relación con el caso de un niño con parálisis cerebral que este jueves tiene 10 años y que supuestamente se quedó en estado vegetativo al nacer por culpa del facultativo. El fiscal no refrenda los cargos.

El Juzgado de lo Penal número 2 de Las Palmas dejó este miércoles visto para sentencia el juicio contra el médico del centro de salud de Mogán Benigno G.N., acusado de condenar a un niño a una vida vegetativa al no atinar a sacarlo de la barriga de su madre el 14 de enero de 2006 y dejarlo 25 minutos con la cabeza asomando y el cuerpo en el canal del parto, hasta que un médico de Urgencias tomó el mando de la situación y extrajo al bebé, sin poder evitar que la falta de oxígeno derivara en una parálisis cerebral irreversible. El facultativo acusado aseveró que había hecho lo que había podido por traer al pequeño al mundo y afirmó que si hoy estaba vegetativo era, probablemente, por una o varias enfermedades congénitas. Los padres del menor A., de 10 años en la actualidad, acusan al facultativo de un delito de imprudencia grave profesional con resultado de lesiones, y a través del abogado Sergio Valentín Peñate piden para él tres años de cárcel y cuatro de inhabilitación. Interesan, además, una indemnización de 1.117.756 euros para poder atender de por vida a un hijo totalmente vegetativo, con responsabilidad civil subsidiaria del Servicio Canario de la Salud. Tanto el fiscal José Antonio Blanco como el abogado defensor Guillermo Pérez y el letrado del SCS, Javier Bordonau, piden la libre absolución. El fiscal no ve pruebas que desvirtúen la presunción de inocencia del facultativo, y la defensa entiende que el niño vino al mundo condenado por tres enfermedades congénitas en las que el médico no tuvo nada que ver.

La versión del facultativo que el 14 de enero de 2006 recibió en el centro de salud a la madre una vecina de Veneguera en estado de parto inminente y decidió que diera a luz allí mismo no coincidió con la del médico de urgencias que acudió a intentar salvar la situación: Benigno G.N. dijo que él había sacado al niño del vientre de la madre, y el médico de urgencias afirmó que no había sido así. Dijo que cuando él entró en la sala el niño sólo tenía la cabeza fuera, y que fue él quien había «terminado de sacarlo» en estado cianótico.

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