Javi Castellano: "Vuelvo seguro de poder dar el cien por cien"
Jueves, 16 de julio 2020, 12:56
Después de prácticamente un año en el dique seco, ¿cómo se encuenta? Muy bien. La rodilla está respondiendo bastante bien. Sí es cierto que se me carga por los entrenamientos, pues ya hace doce meses que empezó la pretemporada pasada y todavía se tiene que adaptar la articulación, pero poco a poco va cogiendo forma. El lunes se le pudo ver trabajando con el resto del grupo por primera vez, ¿qué es lo que siente en estos momentos? La verdad que es una felicidad inmensa, porque ya tenía muchas ganas de competir y de entrenarme con ellos. Llevaba muchos meses apartado del grupo y retomar la normalidad y que la rodilla me responda es lo más importante. ¿Tiene seguridad o va con temor a una recaída? En principio voy muy seguro, pero sí que es cierto que cuando noto que la rodilla a lo mejor se está cargando, pues freno un poco. Pero todo esto entra dentro de lo normal, necesito coger rodaje y hasta que no lo haga, estos pequeños temores de si voy al choque o de alguna entrada, pues son lo lógico, pero irán desapareciendo. Echando un vistazo atrás, ¿cuál ha sido el momento más duro para usted? Sinceramente, lo peor de todo ha sido entrenar solo. Mucho tiempo con Jesús -el readaptador- haciendo bicicleta y viendo a mis compañeros entrenar y eso es lo que se me ha hecho más difícil, el hecho de querer volver ya y saber que no puedo. Encima llegan las vacaciones, todos se van, y me quedo otras dos semanas más entrenando solo. Menos mal que el filial se estaba jugando el ascenso y pude entrenar con ellos un par de días. ¿Cómo recuerda todo el proceso de su lesión? Desde el inicio, las primeras semanas son muy complicadas, porque nunca había sufrido una lesión y encima esta es para largo. Encima, en esos momentos, el fisioterapeuta a modo de broma me dice que ya me podía haber roto el cruzado, que era mejor. Poco a poco me fui recuperando y la verdad que durante todo el proceso sentí el apoyo de mis compañeros, de mi familia y de mis amigos, que la verdad que en ese sentido no puedo tener ninguna queja. Cuando ya empecé a correr, pues sí que es cierto que empiezas a ver la luz, pero el médico me dijo que hasta los siete meses no podía realizar impacto ninguno, por lo que ese periodo se hace eterno. La carrera la llevé muy bien, porque a las dos semanas ya estaba corriendo con normalidad. Y ya estamos aquí. Además, su lesión fue muy extraña. Termina el partido en perfectas condiciones y sale del Calderón, con hielo, pero caminando. De repente le dicen que tiene una lesión para cuatro meses y a las pocas horas, que no, que es más grave y que se pierde toda la temporada. ¿Cómo se encaja eso? Siempre lo voy a recordar. Todo pasó en la primera parte, era como el minuto 34. Robé una pelota y noté dentro de la rodilla como un crujido del hueso, como que algo se había roto. Llegó el descanso y se lo comenté a los médicos, que había notado como un crujido, pero que no me dolía. En ese momento ellos me hicieron pruebas y me descartaron varias lesiones típicas, me insinuaron que podía ser algo de menisco, que si me dolía, que parara y saliese, pero no tenía ningún dolor y ni siquiera se me hinchó la rodilla. Disputé la segunda parte con total normalidad. Corrí, recuperé balones, pasé y jugué como si nada. Al finalizar me puse hielo por precaución, porque no dolía nada, simplemente caminaba y notaba como un chasquido. Posteriormente me hacen las pruebas pertinentes y me dicen que puede ser para cuatro meses, pero cuando llegaron los doctores y me dicen que la lesión ha tocado menisco, cartílago y fémur, que no voy a volver a jugar en la temporada, pues todo el mundo se puede imaginar mi cara. Lo único que decía era, no me puedo creer que acaba de empezar esto y me lo voy a perder. Había sido una pieza fundamental en el año del ascenso, se le intuía como un pilar del equipo en Primera y en el primer partido, adiós a la temporada No hay otra forma de decirlo, y perdónenme por la palabra, pero es una grandísima putada. Llevaba tres años soñando y peleando por el ascenso y cuando lo conseguimos, me pasa lo de la mano y me tengo que operar. Me recupero y logro estar en el debut, pero me pasa esto Realmente no he disfrutado de lo conseguido, por eso este año sueño con estar bien, que me responda la rodilla, y poder disfrutar de la máxima categoría por fin con mis compañeros. ¿De quién se acuerda tras superar esta dura travesía? Muchísimas personas. Familiares, amigos y compañeros. Quizás durante todos estos meses la que más me ha aguantado ha sido mi novia, que ha estado conmigo día a día. Me daba ánimos para ir a tratarme, me escuchaba cuando tenía molestias y me tenía como un marqués en casa. Pero es que todos, desde los jugadores, hasta los preparadores físicos. Todos han estado pendientes de mí, de que no me faltara nada. Mis padres tuvieron que pedir sus vacaciones para turnarse e ir conmigo a Barcelona. No tengo palabras de agradecimiento para todos ellos. ¿Cuánto estuvo en Barcelona? Dos meses y medio encerrado en el hotel. Me despertaba sobre las 11.00 horas, iba a desayunar y ya me metía en rehabilitación desde las 14.00 horas hasta las 20.00 horas. Volvía al hotel, cenaba y ya hasta el día siguiente. Así estuve más de un mes y medio, porque no tenía ganas de salir, no tenía fuerzas para coger las muletas y dar una vuelta, no salía del hotel. Más adelante, vinieron mis amigos a visitarme y me sacaban a cenar, ya apoyaba un poco el pie con las muletas, pero antes era imposible. ¿Qué supuso anímicamente volver a pisar el césped de Barranco Seco? Esos pequeños pasos me dieron oxígeno. Si cuando pasé de estar con dos muletas a caminar con solo una me emocioné porque vi que era un gran paso, pues imagina. Todos los pequeños pasos para mí eran un gran alivio. Cuando me dijeron que ya podía correr, pensaba, esto es lo mejor que hay. ¿En algún momento temió que el fútbol se había acabado para Javi Castellano? Estaba tranquilo porque el doctor me dio mucha confianza. Me dijo que se iba a quedar todo perfecto y que una vez recuperado, la rodilla izquierda iba a estar mejor que la derecha después de todo lo que me puso. Ahora tengo que ir ganando músculo y compensando. Los movimientos que hacías involuntariamente en el campo, ahora tienes que hacerlo con cabeza para que la musculatura coja forma. Se lesionó con Paco Herrera y regresa ahora con Quique Setién, ¿qué tal el cambio? Los entrenamientos son muy parecidos a los que hacíamos con el anterior entrenador. Además, no cambió el preparador físico, pues sigue con nostros Rafa Cristóbal. Me estoy adaptando bastante bien a lo que pide y poco a poco voy cogiendo los conceptos y las cosas que hacemos. Estoy tratando de coger lo que él quiere, pues es lo que hará que al final pueda tener la oportunidad, el hacer mi juego y convencer al técnico. ¿Él habló con usted cuando regresó de Barcelona? El primer día que llegué a Barranco Seco se acercó y estuvo preocupándose por mí y conociéndome. Encima conoce a Cugat de hace muchos años y estuvo preguntándome por la operación. Y de vez en cuando se acercaba a mí y me decía que cómo estaba. Eder Sarabia también me veía en el gimnasio y se acercaba a mí para interesarse. Se portaron muy bien conmigo. Durante su ausencia, la competencia en la medular ha crecido muchísimo. ¿Le preocupa? Para nada. En todos los equipos en los que he estado siempre me lo he currado, he competido al máximo y he intentado ser mejor para ser titular. Siempre he pensado que nunca me han regalado nada. El año de Lobera, por ejemplo, empecé sin jugar y al final acabé siendo titular en el final de la Liga y en la promoción. Y lo mismo me ha pasado en el resto de sitios donde he estado. Entonces, lo que pienso es que si he estado en tantos equipos y al final he acabado jugando debe ser por algo, porque me lo curro, porque compito bien con el compañero o porque soy regular. ¿Cómo se imagina su vuelta al Estadio de Gran Canaria? No he querido pensarlo. Estoy convencido que será un impacto, porque llevo tanto tiempo sin pisar el Estadio. La última vez fue para la despedida de Valerón y fue muy bonito, pero diferente. Ahora me imagino que será algo muy emotivo, el día que mencionen mi nombre por megafonía y ver cómo reacciona la gente. La verdad que estoy muy agradecido a toda la afición, porque cuando me lesioné, recibí muchísimas muestras de apoyo. Recuerdo estar en Barcelona y ver vídeos de la gente cantando mi nombre en el minuto 18, se me ponía la piel de gallina. En esos momentos de frustración, ¿era capaz de ver los partidos de la UD? Y tanto que era capaz. Incluso, a las dos semanas de operarme, me acerqué a ver un partido del equipo en la Península y me resbalé con las muletas, tuve que pisar y esa noche me entro fiebre. Y todo por ir a ver a Las Palmas. Siempre veía los partidos por la televisión, tenía que ver a mi equipo. Llegó su hora. Ojalá me respeten las lesiones y me respete la rodilla, porque yo siempre voy a poner el cien por cien.
Regístrate de forma gratuita
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión