Inversión millonaria al pairo
Hace seis años, en marzo de 2010, entró en uso el mercado de abastos del Centro Comercial Arrecife, junto a la Vía Medular capitalina, gracias a una inversión de 1,2 millones de euros a cargo de la empresa pública Mercasa, con sede en Madrid. Las instalaciones, con 16 puestos, están todas cerradas y sin visos de que puedan reabrirse.
De los 16 puestos, a comienzos de 2015 solamente quedaba en uso la pescadería Meromar, que dejó de operar al poco, certificándose entonces que la gestión del espacio tuvo un comportamiento muy deficiente desde la apertura. Era una muerte anunciada, pues ya en 2014 la pescadería únicamente compartía actividad con una carnicería.
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En contra jugó el alto precio de los alquileres a cargo de la empresa impulsora de la actividad, de capital estatal y con sede en Madrid, con gestores poco ágiles a la hora de analizar el mercado, así como las reclamaciones de los empresarios locales orientadas a rebajar los precios de los contratos. Además, y así fue desde la apertura del mercado, apenas si se practicaron políticas promocionales efectivas, intentando aprovechar los comercios abiertos en el propio Centro Comercial Arrecife y sus zonas adyacentes, también administradas por Mercasa. Así las cosas, supuso un golpe de gracia el cierre del supermercado Marcial, que el 25 de marzo de 2015 estrenó presencia en un edificio próximo, comprado a Cocelan.
Sirva añadir, como anécdota, que en varias zonas hay, bien visibles, carteles de Mercasa, con un número de teléfono de Madrid, para quienes quieran detalles sobre los locales. Fuentes de esta entidad comentaron el pasado miércoles que se confía en que la gestión encomendada a Gentalia, empresa especializada en centros comerciales, sirva para reflotar el espacio.
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