El vertedero cerca a La Montañeta

Los vecinos de La Montañeta denuncian que los malos olores que sufren hace años por la cercanía del vertedero de Salto del Negro se han intensificado «en los últimos meses». Cansados de no poder abrir las ventanas y de la presencia de ratones e insectos piden «una solución» al Ayuntamiento, «que tiene que velar por nosotros».

Es un olor que no se puede soportar», asegura Carmen Sosa, vicepresidenta de la asociación La Milagrosa, que representa a los residentes en el barrio capitalino de La Montañeta, que lleva años denunciando las molestias que le causa tener por vecino un vertedero en el que, considera, no se hace un correcto tratamiento de la basura. Los afectados sienten que «el vertedero está cada vez más cerca» porque «va cogiendo más terreno y va creciendo», y con ello sus problemas. «Últimamente es peor porque ahora huele como a ácido», apunta Maribel Hoyos, presidenta de la organización que representa a los residentes en el barrio, que se queja de que «no podemos sacar a los niños a la calle» y reclama «una solución». «Te dan ganas de vomitar», apunta Carmen Sosa, que considera que el problema radica en el hecho de que «no está enterrando la basura». Por eso pide la intervención del Ayuntamiento, «que es el que tiene que velar por los vecinos». Tomás Sosa, vocal de la asociación vecinal La Milagrosa, certifica que el problema de malos olores se ha recrudecido «de unos meses para acá», algo que achaca a que «no se está llevando el cubrimiento de la basura al día». Añade que «por la mañana y con el calor el olor es insoportable» pero «lo sufrimos casi todo el año». Por eso, no se explica que «los responsables no se pongan manos a la obra» pues «ya son muchos años los que tenemos este problema». Apunta que «el Ayuntamiento dice que todo está bien» y que tampoco «la Policía Local ve que haya nada mal», pero «son muchas las veces que no podemos abrir las ventanas». Algo similar cuenta Nieves Batista, también vecina del barrio. «En cuanto hace un poco de calor o caen tres gotas sale el olor de la tierra», afirma. Además, expresa su preocupación porque «esos vapores los estamos respirando nosotros». Los afectados por estos episodios de malos olores que aseguran son cada vez más frecuentes, indican que no son los únicos que los sufren, pues llegan a otros núcleos. «Están llegando también a barrios como Marzagán», expone Maribel Hoyos. «Pero también a los túneles de La laja y a El Sabinal y el Psiquiátrico», apunta Tomás Sosa. La aparición de ratones e insectos es otro de los problemas que denuncian y vinculan al vertedero. «Yo no he visto tantas cucarachas y hormigas en mi casa como este año», comenta Yolanda Borges.

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