El infierno esta vez será amarillo
Solo queda un día. La espera se ha hecho larga y la sed de venganza ha ido aumentando con el transcurso de la semana. El infierno turco ganó la primera batalla, pero la guerra se decidirá en el Arena. El pabellón insular presentará un fiero aspecto que nada tendrá que envidiar al que se pudo ver en el Abdi Ipekçi Arena el pasado miércoles. La mayor entrada de lo que va de la Eurocopa para el partido más importante de los claretianos en la competición continental. Como dijo el presidente del conjunto amarillo, en Estambul los aficionados turcos hicieron de sexto hombre y supusieron un factor diferencial insalvable para los de García Reneses. Mañana la Isla responderá, como ha hecho siempre, y llevará en volandas a los suyos para luchar por la heroica remontada.
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Hasta ahora la mejor entrada en Europa había sido ante el conjunto polaco Stelmet Zielona Góra al que acudieron 6.786 espectadores. Una buena entrada teniendo en cuenta la cómoda renta que había conseguido en la ida el Herbalife (82-93) y el poco cartel del rival en cuanto a nombres conocidos. Pero lo de mañana será otra historia. Ya no sólo por ser el partido que separa al Gran Canaria de otra final continental -la segunda consecutiva-, sino por el potencial y bagaje que presenta un conjunto de la talla del Galatasaray. Además, no es la marea a amarilla una afición que rinda fácilmente. Fiel a su equipo, los seguidores grancanarios sueñan con la remontada y se dejarán la garganta para que su equipo haga historia una vez más.
Puede que no se cuelgue el cartel de no hay billetes, el horario del partido (20.30 horas) y el hecho de que se juegue entre semana no ayuda a que se vea el primer lleno de la campaña. Pero aún así se verá un magnífico aspecto, un Gran Canaria vestido de gala ante un partido grande. Mañana le llega el turno a los de Ergin Ataman notar la presión ambiental, ver el aro cada vez más pequeño y sentir como les tiembla el pulso en cada tiro libre. Les toca, en definitiva, a los otomanos sufrir de su propia medicina y es que es en el infierno amarillo donde se decide nuevo finalista.
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