El tridente para acabar con la sequía
Con el regreso de Mir y el progreso de Araujo, Jiménez podría alinear por primera vez al anhelado triplete ofensivo frente al Numancia. Con Rubén y el Chino indiscutibles, la duda está en si se atreve a completar el ataque con la figura de la sub-21.
Tres partidos sin marcar son muchos. Demasiados para una Unión Deportiva que se vanagloria de tener la mejor plantilla de la categoría y que cuenta en su nómina con tres delanteros con nivel de Primera jugando en Segunda División. Romper la sequía anotadora contra el Numancia y volver a ganar se antoja como obligatorio esta jornada y para ello Manolo Jiménez podría alinear desde el inicio a Rubén Castro, Sergio Araujo y Rafa Mir. Un tridente con que la afición amarilla lleva soñando desde la pretemporada, pero que hasta ahora no ha podido coincidir en el campo. El Moña lo ha jugado todo, pero la lesión de Araujo en un dedo del pie izquierdo, y las convocatorias de Mir con la selección española sub21 han impedido que este triplete ofensivo coincida sobre el césped.
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La duda está ahora si el técnico, que comienza a estar cuestionado tras los últimos resultados adversos, se atreverá a poner en liza a toda su artillería. Para ello se vería obligado a cambiar el sistema e implantar un 4-3-3 muy ofensivo. Pero vale la pena. Mir llega en un estado de forma brutal tras exhibirse con la Rojita. Tres goles en los dos últimos partidos y cinco en total para cerrar la clasificación al Europeo de 2019 (uno ante Albania, uno frente a Irlanda del Norte, otro ante Albania y dos contra Islandia). En un combinado repleto de jugadores de renombre de Primera, el jugador cedido por el Wolverhampton Wanderers se terminó haciendo con la titularidad a base de buen juego y goles. Todo lo que toca entra y cuando los delanteros están de dulce hay que aprovecharlos.
Por su parte, Araujo entrará en su tercera convocatoria consecutiva. Tuvo minutos ante el Alcorcón en la segunda parte, y contra el Almería ya fue titular. Todavía no está al cien por cien, pero a base de minutos está volviendo a ser el jugador que todos esperan. Ha dejado detalles y está loco por hacer gol y por formar una dupla temible con Rubén Castro. «Quiero hacer 20 goles y dar 10 asistencias a Rubén», decía el Chino el pasado miércoles. Ambición y hambre en un hombre destinado a marcar la diferencia.
Dos inmejorables socios para la gran referencia ofensiva. Rubén Castro ya ha perdido la condición de pichichi de la categoría y su imparable arranque se ha visto frenado. Desde que anotase ante el Extremadura el pasado 16 de septiembre, no ha vuelto a ver portería. Acumula seis goles, pero necesita ayuda para retomar su racha tras cuatro jornadas de sequía. En los últimos enfrentamientos se le ha visto demasiado solo y desasistido en la punta del ataque. Está trabajando a tope para revertir la situación y tiene al Numancia entre ceja y ceja. Sabe que con otros puntas que le acompañen estaría más liberado y vería con buenos ojos repartir la responsabilidad del gol con sus compañeros.
Los ingredientes, por lo tanto, están ahí, solo falta que Jiménez se atreva a usarlos todos en el mismo plato. Las otras opciones que maneja es reservar a Mir como revulsivo en la segunda parte (ya le funcionó contra el Málaga) o dejar al murciano en la banda y a Araujo con libertad de movimientos por detrás de Rubén. En cualquier caso, el preparador del Arahal sabe que mañana se la juega. Solo vale ganar y otro tropiezo podría empezar a poner en peligro su puesto. Jiménez lo sabe, por lo que tiene depositadas gran parte de sus esperanzas en que su tridente mágico acabe con la sequía, corte la mala racha y devuelva a la Unión Deportiva a la senda de la victoria.
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