El gremio de libreros alaba la última obra de Anelio Rodríguez

La semana pasada la vida del escritor palmero Anelio Rodríguez Concepción se vio perturbada por una noticia. La página web de la Confederación Española de Gremios y Asociaciones de Libreros, que reúne 1.600 librerías españolas, recomendaba su último libro, Historia ilustrada del mundo, editado por Pre-Textos y que vio la luz a finales del pasado mes de diciembre.

«El mayor premio es que te recomiende un librero. Estoy en una nube, como si hubiera ganado el premio literario más grande de todos», relató ayer el escritor palmero en una conversación telefónica.

Historia ilustrada del mundo es un álbum familiar en el que cada retrato de los antepasados del autor se acompaña de un texto en el que relata su vida o cuenta algún episodio curioso que merece la pena ser recordado. El resultado es una obra fronteriza, que transita entre la narrativa y la biografía. De hecho, los libreros lo definen en su reseña como «un conjunto de breves retratos de ascendientes del autor, seres próximos y queridos que de repente se hacen literatura, aunque sea una literatura sin ficción, casi sin narrativa, aunque sí pueda haber ensoñación, estetización... magia».

Y es que todo lo que le ha sucedido a Rodríguez Concepción con este libro resulta, cuanto menos, misterioso. «Se presentó el 28 de diciembre en La Palma y rápidamente se agotaron los ejemplares que se habían distribuido en Canarias. Es un poco mágico», comenta el autor que se siente muy honrado por haber sido prescrito por los libreros.

Sospecha que su obra les ha gustado porque supone un ejercicio de memoria muy literario. «Se nutre de la memoria colectiva y de la transmisión oral», cuenta el autor sobre estos obituarios escritos a modo de homenaje. «Son personas reales, pero sus vidas son tan apasionantes que se convierten en personajes literarios», sostiene el escritor que, a través de su antepasados, ha contado «historias muy locales de carácter universal». Los afectos familiares, la lucha diaria para afrontar situaciones de precariedad, la emigración, el ambiente de las cocinas o las relaciones de padres e hijos son algunas de las cuestiones que aborda en este relato íntimo que tiene como escenario La Palma. «El libro escarba en la intrahistoria y eso consigue que tenga un sesgo universal. Hay elementos de las relaciones familiares que hasta en las antípodas son similares», asegura el escritor que con este libro rescata las historias familiares que se transmitieron de una generación a otra en una horquilla temporal que abarca desde la época en la que vivieron sus bisabuelos, por parte materna, hasta un primo casi coetáneo. «Hay personajes muy pintorescos. Otros no lo son. He buscado un equilibrio», señala.

Además, ha procurado no dibujar retratos idealizados. «No los pongo a todos como santos. Hablo de sus virtudes, sus excesos y sus defectos. Eso los humaniza y les da un interés testimonial», abunda sobre su obra.

Doble vida. Anelio Rodríguez Concepción (La Palma, 1963) dice que tiene dos oficios: el de enseñante y el de escritor. Por las mañanas, da clases en el Instituto de Secundaria Luis Cobiella Cuevas de La Palma. Por las tardes, escribe.

Producción. Su vocación literaria se ha traducido en la publicación de once libros de relatos, poesía, novela y ensayo. El último de ellos es Historia ilustrada del mundo. Además, tiene cuatro obras inéditas por publicar.

Presentación. Anelio Rodríguez Concepción presentará su última obra en la librería Rafael Alberti de Madrid el 14 de febrero. Estará acompañado por el laureado escritor y académico de la RAE, José María Merino.