Canalejas sufre una lenta agonía comercial
La farmacia de la calle Canalejas de Arrecife ha dejado de operar, al optar la propiedad por establecerse en un nuevo emplazamiento desde hoy, en la calle Luis Morote, donde en apariencia tendrá el negocio más opciones para que los clientes puedan estacionar sus vehículos. Con el cambio, pierde la neurálgica vía capitalina un negocio capital a la hora de dar vida comercial, haciendo que sean al menos una decena los locales actualmente sin uso entre el enlace con la Plazuela y el parque junto al CIC El Almacén. Quedan abiertos al público la joyería Mapy, la peluquería Maray y las apuestas por la moda Siroco, Amélie, Muss y Ministore; mientras que no se logra que nuevos inversores se arriesguen a hacerse cargo de los numerosos locales cerrados. Como consecuencia, es probable que estos días viva esta neurálgica calle los momentos de contraste más grande con respecto a cualquier fecha de los 80 o los 90, cuando la actividad comercial del lugar llegó a ser ejemplo para el resto de la ciudad. Y está por ver cómo afectarán la obra fijada para la cercana calle Antonio Porlier y Sopranis, que también incidirá sobre Canalejas.
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