Un desequilibrio de 120 millones contra Gran Canaria

Los presupuestos de la Comunidad Autónoma de 2015 a 2018 destinan 120 millones de euros más a Tenerife que a Gran Canaria en inversiones y transferencias de capital. Sus partidas son superiores en cada ejercicio. La inversión per cápita media también ha sido superior, 160 frente a 133 euros.

Jueves, 16 de julio 2020, 04:38

Tirando de los datos que ofrecen la Cuenta General de la Comunidad Autónoma, el Instituto Canario de Estadística y la Ley de Presupuestos de Canarias, el Cabildo grancanario ha puesto negro sobre blanco el manido desequilibrio inversor a favor de Tenerife en las cuentas regionales. Solo en el cuatrienio que va de 2015 a 2018 y sumando únicamente los capítulos VI y VII de tales presupuestos, la diferencia asciende a 120 millones de euros en relación a lo que recibe Gran Canaria, y de 27 euros per cápita de promedio también a favor de la isla picuda.

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El estudio realizado por técnicos del Cabildo parte de los presupuestos ejecutados en los dos primeros años, 2015 y 2016, y los dibujados y sin liquidar correspondientes a este año y el próximo. En cada ejercicio de este periodo el montante de las inversiones y las transferencias de capital, y el indicador de inversión per capita, ha beneficiado siempre a Tenerife.

La diferencia fue de 15 millones en 2015 y de 77 millones en 2016, reduciéndose este año a 4 millones y ampliándose a 24 en los presupuestos previstos para 2018.

Con tales cifras en la mano, el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, denunció este martes que existe «un trato discriminatorio» por parte del Gobierno de Canarias hacia esta isla en comparación con la otra capitalina y se declaró «convencido» de que las diferencias que ha encontrado «son mucho mayores» si se añaden las partidas innominadas que figuran en las cuentas regionales. Puso como ejemplo las inversiones realizadas en infraestructuras jurídicas y turísticas.

Morales achacó estos números y la tendencia que muestran a que «en Canarias hay un poder político y económico que controla su desarrollo y cuenta menos con Gran Canaria», una situación que se extiende «más allá de esta legislatura».

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Por eso exigió «un desarrollo equilibrado» basado en los criterios del Régimen Económico y Fiscal (REF).

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