La esperanza de la torre pediátrica del Materno marca el Día de la Infancia Hospitalizada
La Fundación Canaria Pequeño Valiente reclama espacios específicos para los adolescentes en los hospitales
El lema 'Lanzamiento de besos: porque los besos lo curan casi todo' ha vuelto a abanderar este 13 de mayo, fecha en la que se celebra el Día de la Infancia Hospitalizada. Con este motivo, la Fundación Canaria Pequeño Valiente y la Federación Española de Niños con Cáncer se congregaron a las puertas del Hospital Materno Infantil de Gran Canaria para reivindicar los derechos de los niños y niñas hospitalizados y la habilitación de espacios para adolescentes dentro de estos hospitales.
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La futura torres pediátrica que se edifica junto al Insular estuvo muy presente durante el acto, ya que con esta se busca paliar las deficiencias que presenta el Materno. «La esperamos como agua de mayo», señaló al respecto Olga Díez, psicóloga de la Fundación Canaria Pequeño Valiente.
Una de las reclamaciones más potentes de este año fue esa creación de espacios en los Maternos para pacientes adolescentes, de entre 15 y 17 años, ya que lo habitual es que existan áreas de juego para los más pequeños. «Hablamos de zonas de juego con billar, videoconsolas o espacios donde, siempre que se pueda, les visiten sus amistades o compañeros de clases, sus iguales», matiza Díez.
La psicóloga pone de relieve que siempre es preferible que estos pacientes reciban tratamiento o ingresen en maternos, donde se atienden a menores de edad, que en hospitales donde se encuentran adultos, por lo que resulta vital que estos centros se adapten a ellos.
Acompañamiento familiar
La Fundación Canaria Pequeño Valiente procedió a la lectura de un manifiesto por el Día de la Infancia Hospitalizada, con el que se recordó la importancia de «cumplir la Carta Europea de los Derecho de los Niños y las Niñas Hospitalizadas», que ascienden a 23. Entre ellos, se destacó el acompañamiento de estos menores por parte de sus familiares durante la hospitalización, que los jóvenes pacientes reciban información adaptada a su edad o que sean ingresados junto a otros menores.
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«Lanzamos besos porque hay que sensibilizar a la sociedad sobre lo que supone las largas estancias hospitalarias para los menores y adolescentes con cáncer y sus familias, y porque es imprescindible que todo este proceso lo vivan acompañados de sus padres», reza el texto.
La entidad también hizo un llamamiento para que los menores con cáncer sean atendidos en Unidades Oncohematológicas Pediátricas hasta los 18 años, independientemente de su edad, «un derecho que todavía no se está cumpliendo en varios centros hospitales» del país, y que «es necesario para dar respuesta a sus necesidades específicas». Por último especificaron que lanzan besos «para recordar que los derechos da la infancia deben cumplirse».
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