Así es Gánigo, el nuevo restaurante que conquista Guanarteme con su cocina contemporánea repleta de deliciosas propuestas

En el corazón de Guanarteme, a escasos metros de la emblemática Playa de Las Canteras, ha nacido un espacio gastronómico que ya marca diferencia en el barrio: Gánigo Restaurante. A pesar de su juventud, porque apenas se han cumplido dos semanas desde su apertura, el nombre no se debe a ninguna casualidad. Tres ciudades han sido el hogar de Lucía y su familia, por cierto, hija de hosteleros de toda la vida en la ciudad condal, la que la vio nacer. Desde allí, unos cuantos años en Toledo, donde se formó para algo muy diferente pero, como suele decirse, 'la sangre tira'.

De Gran Canaria se enamoró tan pronto como puso el primer pie, a donde llegó de la mano de su marido y sus dos hijos, precisamente por el trabajo de su esposo y, desde entonces, Lucía arrancó un idilio con la isla, con su cultura y con su gente. Así que, después de tantas escalas, tocaba unir, dándole un nombre canario al local creando un hilo conductor que diera contenido a todo lo que Gánigo tiene que ofrecer: respeto por la tierra que los ha acogido con los brazos abiertos y reinterpretar lo conocido para que, de alguna manera, devolver tanta calidez al público canario.

Para llevar la cocina a buen puerto Lucía y su marido se han rodeado del chef Rayco Ruíz, cuya historia y trayectoria también lo condujo hasta esta encantadora pareja. Ruíz trabajó durante años en diferentes cocinas para costearse la carrera de Ingeniería, pero la crisis de 2008 lo redirigió por completo. Encontró en los fogones su propósito, y se quedó. Hoy, tras años de formación y experiencia, Rayco despliega en Gánigo un repertorio de sabores atrevidos, alegres, desde una impecable ejecución y en una carta a la que, entre todos, han dado forma y sentido.

Un variado ejercicio de seducción desde el principio y hasta el final con entrantes sugerentes, como sus empanadillas rellenas de cordero al estilo canario, consideradas ya como el plato más popular y demandado de Gánigo.

Además, dejan paso a propuestas que combinan técnica, creatividad y más producto y ejecución local, como sus croquetas de chorizo de Teror donde este ingrediente, sorprendentemente se despliega de manera muy sutil y sin invadir el paladar.

No le faltan tampoco las croquetas de jamón de paletilla seleccionada y una buena variedad de ensaladas frescas y en combinaciones de lo más originales.

Eso sí, si eres amante de las berenjenas no te puedes perder su milhojas que acompañan con miel de palma y queso de cabra.

Pero el juego de seducción no termina: tiras de pollo crujientes, torreznos o langostinos le harán muy difícil pasar de página en la carta.

Otro de los platos estrella de Gánigo Restaurante a dos semanas de su apertura, sin duda es el costillar de ternera de vaca gallega, cocinado a baja temperatura con salsa miso y papas revolconas. Una elaboración demandada que está marcando la pauta de este nuevo local en Guanarteme.

En materia de pescados, el cherne y la lubina, al horno y a a la espalda se ofrecen desde el producto fresco, con cocina tradicional y el acento canario se vuelve a hacer notar con las papas arrugadas y el almogrote casero que acompañan y alegran el cherne.

Pero si por algo este nuevo restaurante está dando mucho que hablar es por su perfecta ejecución en materia de arroces con una completísima propuesta donde no falta el arroz del 'senyoret', el intenso arroz de rabo de toro, el exclusivo arroz de ternera y foie o el de verduras con un sorprendente toque de kimchi.

Todos y cada uno son para parar y probar, pero, si existe una elaboración que merezca una visita sin demora, precisamente es por su falso risotto ibérico trufado, elaborado con puntalette, una pasta en forma de arroz de sémola de trigo donde la textura final hacen aún más agradable la receta. Un plato soberbio que en Gánigo saben tratar y exaltar de manera sobresaliente.

Dos son los más aplaudidos de su carta y ambos de alma canaria. El primero, postre canario donde un crujiente crumble de gofio hace de cuna a un cremoso de plátano y su garrapiñado.

El segundo, dependiendo de temporada y del producto fresco, semifrío de tuno indio al que tampoco le falta galleta crujiente y su correspondiente garrapiñado.

Acertadamente, en Gánigo Restaurante los ambientes están perfectamente marcados y diferenciados. Una zona más desenfadada en bancos y mesas de piedra, ideal para ir en grupo o compartir entre amigos. Una segunda donde citas para dos o pocos más encontrarán el lugar ideal para un encuentro de negocios o en pareja y una terraza desde la que se advierte la Playa de Las Canteras porque está a escasos metros de la misma, donde disfrutar de una apacible sobremesa.

Los detalles que se suceden, desde su cocina vista completan la calidez con la que Lucía recibe en la puerta a los comensales, como su vajilla, de los canarios Mira Cerámicas o sus textiles. Un compendio que te hará sentirte en casa. Porque Gánigo Restaurante no es solo una nueva apertura. Es una declaración de intenciones y de respeto que ha llegado para completar la oferta gastronómica capitalina huyendo de grandes artificios, para que el comensal se sienta en casa y para que siempre sienta ganas de volver. Y todo ello, en un barrio en plena efervescencia como Guanarteme, a donde ellos han llegado para alzar su propuesta diferente, cargada de identidad y con acreditado sabor.

Temas

• Gastronomía
• Restaurantes
• familia
• Guanarteme
• Playa de Las Canteras
• Gran Canaria
• Las Palmas de Gran Canaria