La intensa lluvia de Filomena da paso al fuerte oleaje y se espera nieve

El segundo asalto de la borrasca Filomena sobre las islas volvió ayer a centrar su esfuerzo en Gran Canaria que de lejos ha sido la isla más beneficiada por las precipitaciones. Tras la lluvia puede llegar la nieve. Según datos del Cabildo de Gran Canaria, en las medianías y cumbres del sur de la isla se han superado entre el miércoles y este jueves los 200 litros por metro cuadrado. Un registro que hacía años que no se veía por el paso de una única borrasca. De hecho, la Cuenca de Tirajana ha sido una de las más beneficiadas en las últimas horas, dejando 90 litros por metro cuadrado hasta las 17.00 horas en Las Tirajanas y 85,2 litros por metro cuadrado en Cuevas del Pinar, también en San Bartolomé de Tirajana. Tampoco se queda atrás Tejeda, con más de 58 litros por metro cuadrado.

El mayor registro de precipitaciones en la jornada de este jueves en Gran Canaria ascendió hasta los 135,9 litros por metro cuadrado, según el portal Hdmeteo.com del Cabildo insular.

Desde las 02.00 horas hasta las 19.00 horas de este jueves la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) había registrado 3.219 rayos cerca de las islas conforme avanzaba Filomena por el norte del archipiélago.

Las lluvias seguirán empapando este viernes la isla aunque ceden el protagonismo al fuerte oleaje y puede producirse la primera nevada del año en cumbres de Gran Canaria, situación que también se espera en Tenerife y La Palma. Estas llegarán tras el cambio en la dirección del viento que pasará del suroeste al nordeste, recuperando el régimen de alisio, que además traerá un descenso de las temperaturas tanto máximas como mínimas.

De momento, la Dirección General de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias ha activado desde la pasada medianoche la alerta por fenómenos costeros en todas las islas por olas que pueden alcanzar los cinco metros en todo el litoral, aunque será más intenso en la costa norte. Además, Gran Canaria estará hasta las 06.00 horas en aviso naranja por rachas de 90 kilómetros por hora, afectando especialmente a medianías y cumbres, con especial atención al giro de viento a noroeste que se producirá durante la madrugada.

A este se suma un aviso amarillo por lluvias que pueden dejar 15 litros en una hora y hasta 60 en doce horas especialmente en la vertiente sur y oeste de estas isla, principalmente al suroeste como las dos jornadas anteriores.

En resumen, este viernes se esperan cielos nubosos en las vertientes del sur con chubascos, sin descartar que sean localmente fuertes y persistentes, existiendo avisos en vigor, y que durante la primera mitad del día pueden estar acompañados de aparato eléctrico, siendo menos probables en vertientes sur a partir del mediodía.

Se prevén rachas máximas superiores a los 70 kilómetros por hora en zonas expuestas, alcanzando los 90 kilómetros por hora en las medianías y cumbres durante la madrugada y primeras horas de la mañana, tendiendo a remitir por la tarde. A última hora del viernes se pueden dejar precipitaciones en forma de nieve en la isla a partir de los 1.800 o 1.900 metros.

La inestabilidad se mantendrá también el sábado, con intervalos nubosos tendiendo a nuboso en el norte de las islas de más relieve, con lluvias débiles localmente moderadas y persistentes. Las precipitaciones pueden ser en forma de nieve en cumbres de Gran Canaria y con mayor probabilidad en Tenerife y La Palma. En el caso de Gran Canaria la cota de nieve puede bajar hasta los 1.500 o 1.600 metros, según la predicción automática de la Aemet. En el resto de zonas, intervalos nubosos, con baja probabilidad de lluvias débiles, ocasionales y dispersas. Las temperaturas experimentarán un ligero a moderado descenso, más acusado en las máximas y el viento será del noroeste con intervalos de fuerte en la primera mitad del día en cumbres, donde no se descartan rachas muy fuertes. Durante la tarde girará a componente norte moderado.

El domingo se mantendrá cierta inestabilidad en las islas, aunque tenderá a remitir.