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Cauce del río Rin (Alemania) el pasado verano. Afp
La sequía golpea a los ríos europeos: dos de cada tres llevan menos agua

La sequía golpea a los ríos europeos: dos de cada tres llevan menos agua

El calor extremo merma el caudal y deja una pérdida récord de hielo en los glaciares de los Alpes, según el alarmante balance del clima de 2022 que acaba de presentar Copernicus y que señala que la temperatura en Europa aumenta al doble de la tasa mundial

Jueves, 20 de abril 2023, 07:07

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Los males climáticos que afectan a España se están extendiendo al resto de Europa, incluidas aquellas zonas que parecían estar a salvo del calor y la sequía. El remoto archipiélago de Svalbard, el lugar habitado más cercano al Polo Norte, sufrió su verano más caluroso en 2022. Groenlandia registró un deshielo récord, y las altas temperaturas estivales también provocaron una pérdida de hielo en los glaciares de los Alpes como jamás se había visto antes.

La falta de lluvias impactó de lleno en el caudal de los ríos europeos: el 63% lleva menos agua de la habitual. Y por si fuera poco Europa registró un récord de horas de sol y las temperaturas aumentaron al doble de la media mundial, más rápido que en cualquier otro continente. Este es el inquietante panorama que dibuja el servicio de Cambio Climático de Copernicus en su Informe sobre el Estado del Clima en Europa correspondiente a 2022. Vamos a desglosarlo.

El segundo año más cálido en Europa y el verano más caluroso

La sequía afectó a una gran parte de Europa durante 2022. Fue también el segundo año más cálido desde 1950 y, en línea con lo ocurrido en España, sufrió el verano más caluroso desde que hay registros. Esas altas temperaturas se vieron agravadas por fenómenos extremos como intensas olas de calor, prolongadas sequías e incendios forestales de grandes proporciones. Así lo recoge el documento de Copernicus, que detalla información sobre el clima y el calentamiento global gracias a su red de satélites. Según los datos aportados, la temperatura media europea de los últimos cinco años se situó en torno a 2,2ºC por encima de la era preindustrial (1850-1900). Concretamente en 2022 la temperatura subió 0,9ºC por encima de la media del periodo de referencia 1991-2020, y 1,4ºC en verano, lo que disparó los días con estrés térmico fuerte o muy fuerte en toda Europa, especialmente en el sur. Cabe recordar que en el verano de 2022 España registró un récord de calor extremo con 42 días bajo situación de ola de calor.

Número de días en los que hubo «fuerte estrés térmico»*

Datos de los meses de junio, julio y agosto de 2022

10

20

30

50

70

92

1

*Índice de clima térmico universal, o UTCI, entre 32 y 38°C

Fuente: ERA5-HEAT, C3S/CEPMPM

Número de días en los que hubo «fuerte estrés térmico»*

Datos de los meses de junio, julio y agosto de 2022

1

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50

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80

92

*Índice de clima térmico universal, o UTCI, entre 32 y 38°C

Fuente: ERA5-HEAT, C3S/CEPMPM

A juicio del italiano Carlo Buontempo, director del Servicio de Cambio Climático de Copernicus, «el informe destaca los alarmantes cambios de nuestro clima, entre ellos el verano más caluroso jamás registrado en Europa, marcado por olas de calor marinas sin precedentes en el Mar Mediterráneo y temperaturas récord en Groenlandia».

Menos lluvia en Europa y menos hielo en los glaciares de los Alpes

Durante el invierno de 2021-2022, gran parte de Europa experimentó hasta 30 días de nieve menos que la media. En primavera, las precipitaciones fueron inferiores a la media en gran parte del continente, y en mayo se registraron las más bajas desde que hay registros pluviométricos para ese mes.

 

La falta de nieve invernal y las altas temperaturas estivales provocaron una pérdida récord de hielo de los glaciares de los Alpes, equivalente a más de 5 kilómetros cúbicos de hielo. Para, hacernos una idea, con esa cantidad de hielo se podría llenar 1,5 veces el embalse de la Serena, el mayor de España (3.200 hectómetros cúbicos).

La sequía deja su huella en los ríos europeos

La sequía (en términos de extensión de área afectada, 2022 fue el año más seco desde 1991), golpeó como nunca a los niveles de humedad del suelo y al caudal de los ríos. La anomalía anual de la humedad del suelo fue la segunda más baja de los últimos 50 años y sólo en zonas aisladas se registraron condiciones de humedad del suelo superiores a la media.

Anomalías mensuales del caudal medio de los ríos

Datos de agosto de 2022 respecto a la media entre 1991-2020, en %

75-90

60-75

40-60

> 90

25-40

10-25

< 10

Fuente: EFAS, Copernicus EMS/ECMWF

Anomalías mensuales del caudal medio de los ríos

Datos de agosto de 2022 respecto a la media entre 1991-2020

Excepcionalmente alto

Notablemente alto

Superior a la media

En la media

Inferior a la media

Notablemente bajo

Excepcionalmente bajo

Fuente: EFAS, Copernicus EMS/ECMWF

Además, el caudal de los ríos europeos fue el segundo más bajo registrado, lo que supone el sexto año consecutivo con caudales inferiores a la media. Un 63% de los ríos europeos (prácticamente dos de cada tres) tuvieron caudales inferiores a la media. En concreto, los ríos de la Península Ibérica y Centroeuropa presentaron caudales «excepcionalmente bajos».

Récord de emisiones de carbono desde 2007 por los incendios

Copernicus detectó un aumento significativo de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de los incendios forestales en algunas regiones europeas en el verano de 2022. Las emisiones totales de este gas de efecto invernadero fueron las más altas desde 2007. Y en España (donde el pasado verano se registraron algunos de los mayores incendios del continente), Francia, Alemania y Eslovenia, estas emisiones fueron las mayores en al menos los últimos 20 años.

Temperaturas altas en las gélidas islas del Arca de Noé

El Ártico se está calentando más rápidamente que el resto del planeta. Y es allí donde más se están sintiendo los efectos del cambio climático. 2022 fue el sexto año más cálido registrado en el Ártico. Una de las regiones más afectadas fue Svalbard. Este archipiélago situado a medio camino entre Noruega y el Polo Norte vivió el verano más cálido jamás registrado, con unas temperaturas que superaron en 2,5 °C la media, casi el doble que la media europea (1,4ºC por encima).

El almacén de semillas de las Svalbard, conocido como el Arca de Noé, cubierto de nieve y hielo durante un invierno. Archivo
El almacén de semillas de las Svalbard, conocido como el Arca de Noé, sin hielo durante un verano. Archivo

Muy cerca de Longyearbyen, la ciudad más al norte del mundo y capital de las Svalbard, se encuentra el Banco Mundial de Semillas, una especie de Arca de Noé vegetal construida para salvaguardar una copia de todas las plantas comestibles del mundo y afrontar un hipotético desastre global. Su conservación depende en buena medida de que el almacén siga cubierto de hielo. Ese almacén ya ha visto en los últimos veranos cómo desaparecía su armazón natural de hielo.

Hasta 8 grados más en Groenlandia

Groenlandia es otro ejemplo de que el cambio climático avanza con paso firme hacia la Europa más septentrional. En 2022, la gran isla que forma parte del Reino de Dinamarca experimentó condiciones climáticas extremas, como un calor excepcional y lluvias en septiembre, una época del año en la que la nieve es más habitual.

 

Las temperaturas medias ese mes fueron hasta 8°C superiores a la media (las más altas registradas), y la isla se vio afectada por tres olas de calor diferentes. Esta combinación provocó un deshielo récord, que afectó al menos al 23% de la capa de hielo en el punto álgido de la primera ola.

La mayor cantidad de radiación solar en 40 años

El informe sobre el Estado del Clima en Europa también recoge que Europa recibió la mayor cantidad de radiación solar en superficie de los últimos 40 años. Como resultado, el potencial de generación de energía solar fotovoltaica fue superior a la media en la mayor parte del continente. Pero no hay mal que por bien no venga. En relación con ese dato, Samantha Burgess, directora adjunta de Copernicus, destacó que recursos energéticos renovables, como la energía solar y la eólica, son fundamentales «para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y mitigar los peores efectos del cambio climático».

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