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La playa Arcoíris en Fraser Island (Australia)
Playas de colores, dónde están las más espectaculares

Playas de colores, dónde están las más espectaculares

Hay arenales más allá de la paleta de los cremas y dorados. Arenas blancas inmaculadas, rosas, rojas, púrpuras, negras, verdes e incluso con todas las tonalidades del arcoíris

Lunes, 20 de julio 2020

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¿Cuántos colores de arena diría que existen? En realidad, casi tantos como playas. Las que nos rodean suelen tener unos tonos que van del crema pálido al dorado o caramelo, pero en algunos lugares del mundo -incluso en nuestro propio país- las partículas de arena pueden ser de color rojo, marrón chocolate, rosa, naranja, oro, púrpura, verde, negro o incluso arco iris. ¿Y por qué sucede esto? «Durante milenios, las olas recorren el litoral formando áreas planas y estas nuevas extensiones comienzan a acumular sedimentos de lavado desde las más profundas tierras marinas. Con la ayuda de la erosión producida por los vientos y las tormentas costeras, empujan los sedimentos desde lo más profundo del mar y nace una playa en la costa. El color de la arena, por lo general, refleja el paisaje de su entorno y la composición del suelo marino adyacente. La actividad volcánica producida durante tantos años, un coral triturado o distintas piedras preciosas cercanas puede ser la causa de que la arena tenga distintos tonos de color», explica Jesús Ángel Franco, un coleccionista que atesora más de 1.400 arenas de diferentes playas de todo el mundo.

Arena blanca: Hyams, en el Libro Guinness de los Récords

Probablemente si nos preguntan dónde se encuentran las playas con la arena más blanca del mundo diríamos que en el Caribe. Pues no, están en Australia. Concretamente en Hyams Beach, un pueblo situado en Nueva Gales del Sur, que está rodeado por tres playas de un tono blanco brillante: Chinamans Beach (en el norte), playa del marinero (en el sur) y Hyams Beach. «Esta última, el arenal más grande de los tres, tiene una longitud de aproximadamente dos kilómetros. Este pueblo australiano figura en el Libro Guinness de los Récords por tener las playas con la arena más blanca del mundo gracias a sus finas partículas de cuarzo», explica Jesús Ángel Franco.

Arena arcoíris: más de 70 tonalidades en un único arenal

Rainbow Beach, en la isla australiana de Fraser, es imposible de clasificar por una tonalidad concreta, puesto que su arena muestra más de 70 colores diferentes, gracias a las olas y los vientos. La mayoría de los tonos que visten la playa también se puede ver en los acantilados que la rodean y que se formaron durante la última edad de hielo. Las rocas encierran tantos colores que las comparan con los colores de un sorbete de arcoíris. «Es un verdadero placer cavar en la arena y ver las capas de diferentes colores, con bandas que crean una nueva obra de arte con cada barrido de la mano», invita Jesús Ángel Blanco.

Arena verde: un espectáculo esmeralda en Hawai

Dos de los lugares del mundo donde podemos encontrar más fácilmente arenales de color verde son las islas de Hawai –Papakolea es de las más espectaculares– y Galápagos, pero no son los únicos. De hecho, hay playas de este tono en zonas volcánicas mucho más cercanas como, por ejemplo, en el archipiélago canario. «Este tipo de arena está compuesta principalmente de cristales de olivino que erosionan el basalto (lava). Estos cristales son más pesados y hace que se queden depositados en la playa mientras que los granos de arena más ligeros son lavados por la actividad del fuerte oleaje. El olivino es un mineral de silicato que contiene hierro y magnesio», apunta Franco.

Arena chocolate: el tono más goloso está en California

Rockaway Beach (California) exhibe uno de los más deliciosos colores que se puede ver en ninguna otra playa, el chocolate. Este color inusual en los arenales ocurre por la erosión de la piedra caliza de color gris azulado que se mezcla con la piedra volcánica verde de las laderas que rodean la playa californiana.

Arena rosa: la belleza de los esqueletos de coral

Las playas de color rosa también son bastantes raras. Solo existen en zonas cercanas a grandes formaciones de arrecifes de coral que contienen un pequeño organismo con un esqueleto de color rojo. «Cuando mueren, caen al fondo del océano y se erosionan gradualmente en pequeñas partículas que son llevadas a la orilla por la corriente, donde se mezclan con la arena». El mejor ejemplo de una playa de arena rosa puede verse en Harbor Island (Bahamas), aunque también existen playas rosadas en Puerto Rico, Bermudas, Barbados, Filipinas e incluso en Escocia.

Arena naranja: en Malta y Cerdeña

La playa de Ramla il-Hamra, en la isla maltesa de Gozo, y la de Porto Ferro, respaldada por grandes dunas en la isla de Cerdeña, tienen uno de los colores más naranjas que podemos encontrar en todo el mundo. Ambas islas son de origen volcánico en su naturaleza, sobresaliendo desde el fondo del Mediterráneo en el extremo sur de Italia. «Sus arenas de color naranja se derivan de depósitos volcánicos, así como de una inusual piedra caliza naranja que se encuentra en la zona», precisa el coleccionista leonés.

Arena púrpura: una playa de surfistas en California

Cuando llueve, el granate de manganeso de las colinas que rodean la playa de Pfeiffer en Big Sur (California) baja hacia el mar y tiñe la arena de un púrpura muy característico. «Cuanto más al norte vas, más intenso es el color». Sus tonalidades varían según la luz, desde el violeta, lavanda o rojo rubí hasta el rosado. Es un lugar muy frecuentado por surfistas y visitantes locales, pero alejado del turismo de masas. En el otro lado del continente, también se pueden ver playas de color púrpura por el piémontite mineral que poseen las montañas de Long Island.

Arena roja: una de las más difíciles de encontar

«Hay muy pocas playas de color rojo en el mundo», adelanta Franco. Se pueden encontrar en Hawai, Isla Rábida, Galápagos, Santorini (Grecia) y alguna en Asturias. En estos casos, la arena se compone principalmente de hierro. «Gracias a su singular geología, Hawai es la isla que más playas tiene con este color. Situada Maui, Kaihalulu Beach está escondida en una pequeña cala cerca de la bahía de Hana, en la mitad oriental de la isla. La arena obtiene su color rojo-negro por el desmoronamiento de la colina rica en hierro que rodea la bahía», añade el especialista.

Arena negra: un verdadero tesoro en Tenerife

Y, por último, las playas de arena negra, un sorprendente resultado de la actividad volcánica cercana a la costa. Este tipo de arenales se suelen ver «en regiones con alta energía de olas, en los flancos de los volcanes y en áreas donde la mayor parte de la roca es magmática, de color oscuro o pobre en sílice». También puede estar compuesta de un número de diferentes minerales oscuros, la mayoría ricos en hierro y más pesados que la arena de sílice. «Este peso le permite permanecer cuando la fuerza de las olas devuelve los granos de arena más ligeros al mar». Las arenas negras son también una fuente de piedras preciosas como los granates, rubíes, zafiros, topacios y, por supuesto, también de diamantes. La playas de arena negra se pueden encontrar en cualquier zona volcánica, especialmente en islas del Pacífico Sur, Tahití, Hawaii, Antillas, Filipinas, Islandia, Grecia y, en España, las islas Canarias.

«La arena más rara es la de una playa japonesa con forma de estrella»

Jesús Ángel Blanco (Coleccionista de arena)

–¿Cómo termina un joven de 33 años de Valencia de don Juan (León) con una colección de más de 1.400 arenas de todo el mundo?

–Por casualidad. Mi padre solo podía coger vacaciones en invierno, así que todos los años por Navidad nos íbamos a Canarias. Y allí me enamoré de las arenas negras de Tenerife. Al principio recogía las muestras en los botes de los carretes de foto. Ahora lo hago en tubos de ensayo, que ocupan la mitad y además se ve el contenido.

–¿Y cómo las consigue, porque me imagino que no ha estado en todas esas playas?

–Las intercambio con otros coleccionistas a los que he conocido a través de páginas web y de Facebook. Tengo una lista de arenas para intercambiar de las que me sobran.

–¿Cómo si fuesen cromos?

– Eso es. Lo que hacemos es que sean más o menos equitativas. Es decir, si ofrezco una de Polinesia muy difícil de conseguir, espero a cambio una de esa categoría.

–Vamos, que no cambia a un jugador de primera división por uno de Segunda B.

– Algo parecido, ten en cuenta que no se paga nada por las arenas para evitar precisamente que se especule con ellas. Las enviamos por correo postal y punto.

–¿Y qué playa es el Messi de las arenas?

– Unas de Japón que tienen una arena con forma de estrella. De las que yo tengo, la más especial es una rosa de la isla de Komodo.

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