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En mayo de 2021 abrió La Colonial de Fontanales. Marco Martel y Miguel Rabassó iniciaron una aventura que ha puesto en valor desde el principio el producto local, erigiéndose en embajadores del enorme trabajo que hacen en el campo las queserías de Moya. Ambos se consideran artesanos de la cocina y este jueves han dado un paso más abriendo El Despacho de La Colonial en la calle principal del casco de Moya.
«El Despacho es nuestro niño pequeño. Es fruto de esa escucha activa e insaciable de nuestros clientes que no han parado de regalarnos hacia dónde quieren ir y nosotros, como buenos embajadores, hemos sido buenos oyentes y hemos reaccionado«, destacan Marco Martel y Miguel Rabassó, propietarios de La Colonial de Fontanales y de El Despacho.
El casco de Moya amplía su oferta gastronómica con El Despacho de La Colonial. En un acto muy emotivo, con la presencia destacada de Raúl Afonso, alcalde de la Villa de Moya, y Miguel Hidalgo, consejero del Sector Primario y Soberanía Alimentaria, se procedió a la inauguración oficial de este local que estará abierto todos los días de 12.00 a 19.00 horas. Con tres mesas en el interior y ocho meses en la terraza, el Despacho de La Colonial ofrece «una carta dinámica. Contamos con platos fijos que ampliamos desde el obrador que se encontrará en La Colonial de Fontanales con platos de temporada», destaca.
La famosa tabla de queso, la crema de champiñones, ensaladilla rusa, albóndigas de carne, lasañas, garbanzada estofada, así como sus postres caseros, son algunas de las opciones que el cliente encontrará día a día en El Despacho de La Colonial, sin olvidar los magníficos vinos de Gran Canaria. Junto a la oficina de Turismo de la Villa de Moya, El Despacho de La Colonial quiere contribuir también a la dinamización del municipio, como ya lo hace en Fontanales, y seguir potenciando la labor de las ocho queserías de Moya. Los queseros han estado presentes en esta inauguración y es que hay datos que corroboran la labor de embajadores que Marco y Miguel han hecho de los quesos moyenses.
«De enero a agosto hemos comprado y vendido en Fontanales 867 kilos de queso. Teniendo en cuenta que para hacer un kilo de queso necesitamos una media de 7 litros de leche, hemos necesitado 6.069 litros de leche. Para producir esa leche necesitamos unas 190 cabezas de ganado mensual. Con estos datos aportados por el propio Gran Canaria Mosaico, cada cabeza de ganado es capaz de limpiar una hectácera, por lo tanto, podemos concluir que nuestra apuesta por el queso artesano de pastoreo ha contribuido al mantenimiento de 190 hectáreas de bosque que equivalen a 85 campos de fútbol. Con este nuevo local nuestra satisfacción crece al sentir que seguimos protegiendo el entorno, a la vez que generamos comercio y desarrollo local. Esto es lo que realmente nos aporta y lo que dejamos como legado a las futuras generaciones. La hostelería por sí sola está bien, pero si además se contribuye a cuidar tu tierra, mucho mejor«, destacó Marco Martel en su discurso de inauguración.
Disfrutar de un buen queso, de un vino de la tierra, de platos caseros, de unos postres para chuparse los dedos y de un ambiente agradable, son señas de identidad que La Colonial de Fontanales muestra también desde este jueves en El Despacho del casco de Moya.
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