Miguel Ángel Sosa: «El deseo fue quien escribió el libro, yo solo lo escuché»

El historiador y escritor grancanario Miguel Ángel Sosa Machín presenta este jueves, a las 19.00 horas, su nuevo libro, 'Territorios del deseo' (Beginbook Editorial), en el Gabinete Literario en Las Palmas de Gran Canaria.

En esta ocasión, el autor no parte de una idea premeditada ni de una estructura rígida: deja que el deseo, como fuerza viva y cambiante, lo guíe.

'Territorios del deseo' se manifiesta como una travesía literaria donde cuerpo y alma, poesía y ensayo, tiempo y memoria, confluyen en una reflexión tan íntima como universal. El autor lo explica con claridad: «El deseo fue tomando forma, fue hablándome, y yo simplemente me dejé llevar».

La génesis del libro fue casi inevitable. Surgió como una consecuencia natural de un proyecto anterior, 'Anatomía del tiempo', con el cual conforma un tríptico. Sin embargo, en este nuevo libro el deseo cobra una presencia mucho más tangible: «Fue adquiriendo corporeidad, dejó de ser solo un sentimiento y se convirtió en algo físico, algo que se puede casi tocar».

Sin pretensión inicial de mezclar géneros, la obra se desliza con libertad entre el ensayo, la poesía y la narrativa. Para el autor, ese cruce es el resultado de una necesidad expresiva: «El deseo necesitaba ese camino, esa forma de expresión». De ahí nace un texto que no busca encasillarse, sino abrirse al lector como un territorio virgen, sin explorar.

La dimensión corporal es esencial en el volumen del autor grancanario: «El deseo es cuerpo, pero también es espíritu». El texto refleja esa dualidad constante del ser humano, abarcando aspectos tan diversos como la ambición, la sexualidad, el odio o la espiritualidad. No hay una voz predominante, sino un mosaico de emociones y pulsiones humanas, equilibradas por la escucha atenta a ese deseo que se manifiesta en palabras.

«El deseo es el verdadero protagonista», afirma. Aunque lo escrito parte de su visión personal, insiste en que cada lector hará su propio recorrido, «cuando alguien lee, el deseo se transforma, se adentra en su alma, en su corazón, en sus necesidades». En ese sentido, la obra busca universalizar lo individual y convertirse en un espejo del lector.

El proceso creativo fue, como lo describe Miguel Ángel Sosa, desafiante. «Es como navegar de noche, sin saber si llegarás a puerto o te hundirás», apunta. Pero esa incertidumbre, lejos de ser un obstáculo, fue parte esencial del viaje. El objetivo final era claro: «llevar la obra al corazón del lector».

Al preguntarse qué espera que el lector obtenga del libro, el autor del celebrado libro 'Viaje al centro de la infamia' sobre lo sucedido en la Colonia Agrícola Penitenciaria de Tefía, en Fuerteventura, apunta con humildad y profundidad: «Que camine por él, que lo haga suyo, que lo sienta y se reconozca».

Por eso, invita a asistir a la lectura y a las presentaciones del libro en un estado metafórico de desnudez, sin prejuicios, sin expectativas. «La soledad y la desnudez —dice— son los requisitos que las musas exigen para dejarte entrar en su territorio».

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