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Mafalda es una niña que mantiene su aspecto de seis años a pesar de que este mes cumple los sesenta. La primera vez que Quino publicó una tira de Mafalda en la prensa fue el 29 de septiembre de 1964 y, desde entonces, la pequeña argentina continúa soplando las velas de cumpleaños.
Primera tira de Mafalda, publicada el 29 de septiembre de 1964. Editorial Lumen
Primera tira de Mafalda, publicada el 29 de septiembre de 1964. Editorial Lumen
Primera tira de Mafalda, publicada el 29 de septiembre de 1964. Editorial Lumen
Primera tira de Mafalda, publicada el 29 de septiembre de 1964, en el semanario argentino Primera Plana. Editorial Lumen
Mafalda nació en una familia de clase media de Buenos Aires. Es una niña con mucha conciencia social, cuyo programa favorito es 'El Pájaro Loco', le gusta escuchar a The Beatles en la radio y estar pendiente de toda la actualidad informativa que sale en la televisión.
Todo ello define parte de la personalidad de Mafalda, pero si hubiera que calificarla con una sola palabra, Lola Martínez de Albornoz, editora senior de Lumen, utilizaría «contestataria». De hecho, así se llamó el primer libro que salió fuera de Argentina, en el que se recogían todas las tiras que había publicado Quino hasta entonces: 'Mafalda la contestataria'. «Yo creo que ese adjetivo le podría ir (bien), pero también Umberto Eco, que escribió el prólogo de esa misma edición, dijo que era una heroína de nuestro tiempo», afirma Martínez de Albornoz.
Idealista, contestataria o heroína… Son muchos los adjetivos con los que se podría describir a esta pequeña. Pero la realidad es que a Mafalda no se le puede entender sin su pandilla.
Para ella, lo más importante es la amistad, a pesar de que la personalidad de muchos de los personajes que le acompañan en las viñetas es completamente antagónica. «No tiene nada que ver con Susanita. Son la noche y el día y, sin embargo, son muy amigas. La amistad está por encima de todo», dice la editora.
Felipe
Es un soñador, no le gusta ir al colegio, es muy procrastinador
A Mafalda le sirve para conversar
Susanita
Es egoísta, nos muestra el lado más conservador de la sociedad, se preocupa mucho por su imagen y la moda
Hasta la llegada de Libertad, Susanita y Mafalda son las únicas niñas en la pandilla
Manolito
Simboliza el capitalismo, es hijo de un inmigrante gallego muy bruto, sin escrúpulos
Las actitudes de Susanita y Manolito a Mafalda le sirven para que surja el conflicto
Miguelito
Es un filósofo, existencialista, se pasa la vida haciéndose preguntas
A Mafalda este personaje le sirve para filosofar
Libertad
Hace honor a su nombre, es
el símbolo de la libertad y la
independencia de pensamiento
Es la última en incorporarse a la pandilla, apareció en 1970
Guille
Es el hermano pequeño de Mafalda, es la ternura del bebé, la pureza de la infancia
Apareció por primera vez en las viñetas de 1968
Felipe
Es un soñador, no le gusta ir al colegio, es muy procrastinador
A Mafalda le sirve para conversar
Susanita
Es egoísta, nos muestra el lado más conservador de la sociedad, se preocupa mucho por su imagen y la moda
Hasta la llegada de Libertad, Susanita y Mafalda son las únicas niñas en la pandilla
Manolito
Simboliza el capitalismo, es hijo de un inmigrante gallego muy bruto, sin escrúpulos
Las actitudes de Susanita y Manolito a Mafalda le sirven para que surja el conflicto
Miguelito
Es un filósofo, existencialista, se pasa la vida haciéndose preguntas
A Mafalda este personaje le sirve para filosofar
Libertad
Hace honor a su nombre, es
el símbolo de la libertad y la
independencia de pensamiento
Es la última en incorporarse a la pandilla, apareció en 1970
Guille
Es el hermano pequeño de Mafalda, es la ternura del bebé, la pureza de la infancia
Apareció por primera vez en las viñetas de 1968
Felipe
Es un soñador, no le gusta ir al colegio, es muy procrastinador
A Mafalda le sirve para conversar
Susanita
Es egoísta, nos muestra el lado más conservador de la sociedad, se preocupa mucho por su imagen y la moda
Hasta la llegada de Libertad, Susanita y Mafalda son las únicas niñas en la pandilla
Manolito
Simboliza el capitalismo, es hijo de un inmigrante gallego muy bruto, sin escrúpulos
Las actitudes de Susanita y Manolito a Mafalda le sirven para que surja el conflicto
Miguelito
Libertad
Es un filósofo, existencialista, se pasa la vida haciéndose preguntas
Hace honor a su nombre,
es el símbolo de la libertad
y la independencia
de pensamiento
A Mafalda este personaje le sirve para filosofar
Es la última en incorporarse a la pandilla, apareció en 1970
Guille
Es el hermano pequeño de Mafalda, es la ternura del bebé, la pureza de la infancia
Apareció por primera vez en las viñetas de 1968
Felipe
Es un soñador, no le gusta ir al colegio, es muy procrastinador
A Mafalda le sirve para conversar
Susanita
Es egoísta, nos muestra el lado más conservador de la sociedad, se preocupa mucho por su imagen y la moda
Hasta la llegada de Libertad, Susanita y Mafalda son las únicas niñas en la pandilla
Manolito
Simboliza el capitalismo, es hijo de un inmigrante gallego muy bruto, sin escrúpulos
Las actitudes de Susanita y Manolito a Mafalda le sirven para que surja el conflicto
Miguelito
Libertad
Guille
Es un filósofo, existencialista, se pasa la vida haciéndose preguntas
Hace honor a su nombre,
es el símbolo de la libertad
y la independencia
de pensamiento
Es el hermano pequeño de Mafalda, es la ternura del bebé, la pureza de la infancia
A Mafalda este personaje le sirve para filosofar
Es la última en incorporarse a la pandilla, apareció en 1970
Apareció por primera vez en las viñetas de 1968
Una de las principales características que tienen las tiras de Quino es que siempre han estado llenas de metáforas. Desde la sopa hasta el mapamundi.
Mafalda odia la sopa porque odia el autoritarismo y la imposición política.
Tiene una tortuga como mascota a la que llama Burocracia, que simboliza la lentitud.
Utiliza el recurso del globo terráqueo para mostrar su preocupación por los problemas geopolíticos, la paz, el medio ambiente, etc.
Cuida mucho de él, lo pone en la cama a veces porque «está malito».
Mafalda odia la sopa porque odia el autoritarismo y la imposición política.
Tiene una tortuga como mascota a la que llama Burocracia, que simboliza la lentitud.
Utiliza el recurso del globo terráqueo para mostrar su preocupación por los problemas geopolíticos, la paz,
el medio ambiente, etc.
Cuida mucho de él, lo pone en la cama a veces porque «está malito».
Mafalda odia la sopa porque odia el autoritarismo y la imposición política.
Tiene una tortuga como mascota a la que llama Burocracia, que simboliza la lentitud.
Utiliza el recurso del globo terráqueo para mostrar su preocupación por los problemas geopolíticos,
la paz, el medio ambiente, etc.
Cuida mucho de él, lo pone en la cama a veces porque «está malito».
Mafalda odia la sopa porque odia el autoritarismo y la imposición política.
Tiene una tortuga como mascota a la que llama Burocracia, que simboliza la lentitud.
Utiliza el recurso del globo terráqueo para mostrar su preocupación por los problemas geopolíticos,
la paz, el medio ambiente, etc.
Cuida mucho de él, lo pone en la cama a veces porque «está malito».
Mafalda llegó a España en 1973. «Esther Tusquets siempre contaba que ella había hecho una primera tirada muy corta y que nunca intuyó que pudiera lograr el éxito que tuvo. Enseguida los españoles se sintieron muy identificados con esa niña que, en realidad, nos representa a todos», relata Martínez de Albornoz.
Después de cincuenta años y de varios millones de ejemplares vendidos, la editora de Lumen sentencia que «Mafalda está más viva que nunca». «Al final es un personaje y unas situaciones con las que nos identificamos mucho», continúa. «Su visión nos ayuda de alguna manera a comprender el mundo. Y, en realidad, nos sigue hablando de lo mismo: los autoritarismos, las desigualdades, la burocracia, las injusticias», concluye Martínez de Albornoz.
Es por todo ello que Mafalda, a pesar de cumplir 60 años, sigue siendo toda una referencia. La influencia de las viñetas de Quino continúan a día de hoy y, lo más probable, es que siga siendo así a pesar de que avancen las generaciones. Es raro encontrar a una persona que no haya escuchado su nombre o que no sea capaz de identificarla si ve una de sus ilustraciones.
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