Las islas que queremos

En este Día de Canarias pienso en los 2,2 millones de personas que viven en nuestra tierra. Canarios y canarias con nombres y apellidos que sienten, sueñan y padecen en estas islas. Son nuestra razón de ser. Lo que nos ilusiona y nos responsabiliza.

Todas las personas que componemos el Gobierno de Canarias de estas islas compartimos un objetivo común: seguir avanzando hacia una Canarias mejor. Mejor para quienes vivimos aquí. En ese reto estamos fajados. Y con ese objetivo nos levantamos a diario.

Pronto se cumplirán dos años desde la formación de un Gobierno estable, leal y coherente en estas islas. Capaz de afrontar los verdaderos problemas de esta tierra con valentía y determinación. No miramos para otro lado, ni nos escondemos para que vengan otros a solucionarlo más adelante.

Creemos en el empleo como la mejor política social y en los autónomos como el alma de nuestro tejido productivo. Por eso hemos alcanzado las mejores cifras de empleo de los últimos 17 años y por eso tenemos hoy en Canarias más autónomos que nunca: más de 145.000 emprendedores y emprendedoras que cada día levantan la persiana, encienden su ordenador o abren la puerta de sus negocios para ganarse la vida.

Queremos seguir reduciendo las desigualdades y, por eso, contribuimos a sentar las bases que mejoran los indicadores de pobreza y aumentan las rentas medias. Somos conscientes de la realidad de esta tierra y trabajamos, desde diferentes ámbitos, para que la vivienda sea cada día más asequible. Impulsamos la construcción industrializada, reducimos la burocracia, luchamos contra la okupación y buscamos fórmulas de colaboración público-privada para que la oferta de viviendas asequibles aumente. Frente a los que se llenan la boca y no hacían ni hacen nada, nosotros ponemos trabajo, trabajo y más trabajo.

Hemos estado siempre en primera línea en la respuesta ante la crisis migratoria, reclamando solidaridad, apoyo exterior, más compromiso del Estado, un adecuado control de nuestras fronteras y más acuerdos con los países emisores. En esa posición seguimos. Sin movernos ni un milímetro.

Jamás dejaremos tirados a los trabajadores del sector turístico que han hecho posible también la Canarias que somos. Nosotros no mercadeamos con el trabajo de nadie y protegemos el empleo de todos. Desde pequeños nos enseñaron que con las cosas de comer no se juega. Y lo tenemos claro. Como clara tenemos la defensa del medio ambiente y del desarrollo equilibrado con acciones y medidas realistas y útiles, alejadas de la demagogia y del catastrofismo. Queremos una Canarias que prospere sin perder su esencia ni sus valores naturales.

Trabajamos cada día para que nuestras islas sean más sostenibles y competitivas. Para que no nos falten el agua ni la energía. Para que nos convirtamos en un modelo a seguir. En dos años hemos aumentado la inversión en eficiencia energética en un 64%. Son hechos que confirman nuestras palabras.

Nos preocupa también la seguridad y la tranquilidad de las personas que viven en esta tierra y, por eso, defendemos la labor de los policías, los guardias civiles y los militares que cada día se esfuerzan para que los demás podamos vivir tranquilos. Queremos una Canarias segura y tenemos muy claro el papel de nuestras fuerzas armadas y cuerpos de seguridad. Son imprescindibles.

La educación, la formación profesional y nuestras universidades son también objetivos prioritarios. Por eso Canarias se situará en la vanguardia en España en las ratios de alumnado gracias a un acuerdo histórico que hemos hecho posible. Valoramos el talento y trabajamos para retenerlo porque creemos en el conocimiento y la innovación como fuentes de progreso. Creemos en una Canarias que forme para el presente y para el futuro.

Creemos, por supuesto, en el municipalismo, en el poder transformador del trabajo de nuestros 88 ayuntamientos. Sabemos que en los pueblos y ciudades se forja el verdadero cambio y, por eso, apoyamos y valoramos a los alcaldes, alcaldesas y ediles que a diario se esfuerzan por sus vecinos.

Siempre he creído que en los municipios está la primera oportunidad para cambiar las cosas, mejorar la vida de la gente y ofrecer nuevas oportunidades. Creemos en el municipalismo porque estamos convencidos de que todo debe empezar por los cimientos.

Tenemos las piernas bien asentadas y las manos sujetas con fuerza al calzón y a la espalda. Pese al acoso externo, aguantamos. Pese a que sufrimos a rivales poderosos, tenemos maña y resistimos. No nos van a tumbar porque lo que nos mantiene en pie son las ganas de que Canarias prospere para todos. Pese a los traspiés, los toques por dentro y alguna que otra pardelera, seguimos firmes.

Canarias merece un futuro brillante. Los canarios y canarias merecen más y mejores oportunidades. Así son las islas que queremos y seguimos empeñados en conseguirlo. Y disculpen si en el proceso no hacemos tanto ruido, pero es que estamos trabajando por esta tierra.