Artenara perdió más de un tercio de su población en este siglo y Tejeda un 29%

Los dos municipios cumbreros de Gran Canaria no dejan de despoblarse. Perdieron vecinos en la última revisión del padrón de habitantes, a 1 de enero de 2024, y no han dejado de hacerlo en lo que va de siglo. Desde el 1 de enero de 2000 la bajada es del 34,54% en Artenara, que ha perdido a 543 vecinos, pasando de 1.572 a 1.029, y del 28,81% en Tejeda, donde se ha pasado de 2.565 a 1.826. Son 739 menos.

Los dos municipios menos poblados no son los únicos que han visto reducida su población en el siglo XXI. También lo han hecho Moya (7,81%), La Aldea de San Nicolás (7,70) y Valleseco (6,62), aunque estas bajadas no hayan sido continuas. En Moya la caída ha sido de 677 personas, en La Aldea el descenso es de 621 y en Valleseco es de 265.

En Agaete la población sólo ha aumentado en 8 personas en este siglo, un 0,08%, de 5.665 a 5.670, mientras que en Santa María de Guía ha crecido en 103 vecinos, un 0,73%, pasando de 14.032 a 14.135 personas.

Frente a la Gran Canaria que se vacía está la que se llena, liderada por Santa Lucía de Tirajana, que durante este siglo ha ganado 32.124 vecinos y ha experimentado un crecimiento del 71,43%. Al empezar el año 2000 tenía 44.974 residentes y en la reciente revisión del padrón elaborada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) esa cifra era ya de 77.098.

El aumento del padrón experimentado en Santa Lucía de Tirajana supera la población de 14 de los 21 municipios de la isla al empezar 2024.

El segundo crecimiento porcentual más alto se ha dado en el sur, en Mogán, cuya población ha aumentado un 61,20%, subiendo de 13.136 hasta 21.175 personas, mientras que el tercero corresponde a Agüimes, también en el sureste, donde el padrón ha crecido un 60,35%, de 20.692 a 33.179 vecinos.

También están en el sur y el sureste los dos siguientes municipios en crecimiento poblacional durante este siglo. En San Bartolomé de Tirajana el porcentaje es superior a un tercio (35,50%) y las cifras del INE señalan que el aumento ha sido de 14.177 vecinos, desde los 39.939 con que empezó el año 2000 hasta los 54.116 que tenía al comenzar este ejercicio. En Ingenio roza el tercio (33,03%), pasando de 24.616 a 32.747.

En Arucas y Valsequillo el aumento de la población en este siglo supera una quinta parte de la que tenían el 1 de enero de 2000. Arucas ha ganado 6.963 vecinos, subiendo de 31.973 a 38.936, un 21,78%, mientras que Valsequillo ha crecido en 1.719, desde 8.049 hasta 9.768, lo que supone un 21,36%.

Completan la lista los crecimientos del padrón de habitantes experimentados en el presente siglo, de más a menos porcentaje, por Telde (16,75), Firgas (12,83), Gáldar (11,30), Teror (8,24), Las Palmas de Gran Canaria (6,11), San Mateo (5,82) y Santa Brígida (2,19).

Reduciendo la lupa a la evolución del padrón respecto al anterior, a lo largo del año 2023 sólo perdieron población Tejeda, La Aldea y Artenara, donde el número de vecinos bajó un 0,98, un 0,75 y un 0,29%, respectivamente, al disminuir en 18, 57 y 3 personas en cada caso.

El mayor aumento porcentual volvió a registrarse en Santa Lucía de Tirajana (1,88%), que creció en 1.421 vecinos, pero esta vez el segundo puesto es, curiosamente, para un municipio del norte, Agaete, con un incremento del 1,83% y de 102 residentes.

Le siguen Agüimes (1,64) y Mogán (1,58), que ganaron 1.421, 563 y 330 personas, y a continuación se sitúan dos municipios del norte que en las últimas décadas tendían a despoblarse: Guía (1,34) y Moya (1,24), donde el padrón creció en 187 y 98 residentes. Quedan por delante de Ingenio, cuya población aumentó un 1,21%, al ganar 393 vecinos.

Más del 56,55% del aumento poblacional de Gran Canaria durante el último año se ha concentradao entre la capital y Santa Lucía de Tirajana.

La revisión del padrón oficial de habitantes a 1 de enero de 2024 confirma que el crecimiento poblacional de Tenerife sigue siendo superior al que experimenta Gran Canaria, cifrándose en un aumento del 1,16% en el último año frente a un 0,79%. En número de vecinos la isla picuda tuvo un incremento de 10.956 y en la redonda fue de 6.772.

Esa dinámica se viene repitiendo, con distintas cifras, desde que empezó el siglo XXI, cuando Gran Canaria contaba con 31.976 habitantes más, mientras que en el último padrón la diferencia a favor de Tenerife es ya de 91.120 personas, cuando a 1 de enero de 2023 era de 86.936 vecinos.

En relación al año 2020, que arrancó con 73.083 habitantes más en Tenerife que en Gran Canaria, el crecimiento poblacional de la isla picuda ha sido de 26.459 personas y el de la isla redonda no llega a un tercio de esa cifra y se queda en 8.422. Los porcentajes son del 2,85 y el 0,98%, respectivamente.

Alejando la lupa hasta el comienzo de este siglo, la población oficial ha aumentado en Tenerife en 245.698 habitantes, mientras que en Gran Canaria lo ha hecho en 122.782 personas, aproxidamente la mitad, con porcentajes que se elevan al 34,63% en la isla picuda y al 16,57% en la isla redonda.

En números enteros, Gran Canaria ha pasado de 741.161 vecinos de derecho a 863.943 entre el 1 de enero de 2000 y el mismo día de 2024. En Tenerife la cifra inicial de residentes era de 709.365 habitantes y la final es de 955.063.

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