Amanece para los Soles de Tejate

En una primera aproximación al enclave arqueológico de Lajares, las dos construcciones de planta circular medirían unos 35 metros de diámetro y sus ejes unos 17 de largo

En Tejate (Lajares), los soles son dos y lanzan rayos de piedra volcánica que iluminan el pasado prehispánico de Fuerteventura. La Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Canarias ha adjudicado a Servicios Integrales de Patrimonio Histórico SL (Arqueometra) la elaboración de un modelo 3D que defina la extensión del yacimiento arqueológico y de sus muros. Se trata de concretar «exactamente» el área que ocupa y disponer de un registro detallado de las construcciones arquitectónicas que lo componen, resume Nona Perera, directora general.

Como los dos Soles de Tejate se aprecian en todo su esplendor desde el cielo y se difuminan sus contornos en distancias cortas, ya en tierra, parte de los trabajos fotográficos se realizarán desde avioneta. En una primera aproximación, que ahora concretará el proyecto, los dos Soles de Tejate son dos construcciones de planta circular de unos 35 metros de diámetro, de los que parten ejes radiales divergentes de unos 17 metros de longitud, «coincidentes con el tránsito solar de los equinoccios» describe la Dirección General de Patrimonio Cultural.

Además de los dos soles de piedra volcánica, el yacimiento situado en el Malpaís de la Arena se compone de otras construcciones que Nona Perera, responsable regional, califica como «hitos arqueológicos de tendencia circular y piedras hincadas, en un espacio en el que igualmente se documentan asentamientos y enclaves con relevancia cultual, grabados podomorfos, ídolos antropomorfos y otros elementos de la cultura material de la población natural de la isla».

De entre esta decena de construcciones destacan los dos soles que Perera entiende que son dos geoglifos que representan el sol y la luna, «ubicados en posición cenital para que puedan ser vistos desde el cielo y sirvan además para la observación y detección de fenómenos astronómicos precisos acontecidos desde ellos y en marcadores arquetopográficos situados en las montañas y el paisaje circundante del Malpaís de la Arena». Es una línea de trabajo que no se ha desarrollado totalmente, reconoce la también arqueóloga. «Es muy complejo porque tenemos en cuenta que la construcción excepcionalmente conservada, la que representaría el sol cuenta con 59 ejes radiales y teniendo en cuenta el paisaje circundante existen infinidad de posibilidades, ninguna de ellas con total certeza en la actualidad».

La lectura astronómica de este yacimiento de Lajares, en el municipio de La Oliva resulta igualmente compleja establecer orientaciones y alineaciones privilegiadas porque desde la parte central de ellas existe un amplio campo visual: la montaña de Tindaya y la montaña de la Muda, entre otras. Nona Perera añade que la estructura central de tendencia circular es originariamente simétrica «por lo que resulta complicado establecer líneas preferentes entre los 59 ejes radiales». Sin embargo, el recinto de planta elipsoidal situado al sureste «es el predominante. Tenemos una orientación sureste-noroeste direccionada a la salida del sol en el solsticio de invierno sobre la montaña de Caima y la puesta lunar de la Parada Mayor norte sobre la montaña de la Mareta, yacimiento a su vez alineado con Tisajoyre y Esquinzo».

Desde el centro de la estructura del Sol de Tejate de poniente hacia el suroeste se observa la montaña de Tindaya, mientras al sureste se divisa la montaña de la Arena. En cualquier caso, confirma la directora general de Patrimonio Cultural, los denominados Soles de Tejate parecen haberse construido para que fueran «perfectamente visibles desde el cielo».

De los dos soles, sobre el orientado al este, la Dirección General de Patrimonio Cultural plantea que dado está parcialmente desaparecido, la actividad ganadera se puede seguir desarrollando. Sin embargo, precisa, una estructura sin la otra no se entiende. «La población aborigen construye dos, no una. Sin olvidar que existe el espacio y la estructura se conserva parcialmente, además existen fotografías suficientes para restaurar lo intervenido y restituir lo desaparecido».

No se trata sólo de los dos soles, matiza Perera, sino de decenas y decenas de unidades de diferentes medidas y desarrollos. «No conozco construcciones arquitectónicas similares ni parecidas. La estructura mejor conservada es grandiosa y nos indica la capacidad de quienes la levantaron. Nos habla directamente de sus creencias y de cómo organizaron el espacio Malpaís de la Arena».

El yacimiento de los Soles de Tejate resulta excepcional sobre todo por que sólo se puede apreciar desde arriba. «Estas unidades se construyen para ser vistas desde el cielo, para que los seres que habitan en el espacio celeste las vean, están dirigidas a las deidades que viven en un nivel superior. Las podemos ver desde un avión dada su magnitud, pero desde luego cuando advertimos su presencia lo hicimos desde tierra, donde se pueden observar desde varios ángulos».

Para este particular ejemplo de arqueoastronomía, la Asociación Astronómica de Fuerteventura solicitó hace tres años la incoación del expediente de Bien de Interés Cultural (BIC) por el Cabildo. Los trabajos recién adjudicados por Patrimonio Cultural por 15.000 euros bien pueden servir de base para fundamentar esta petición de protección.